La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 37 años, vecino de Almendralejo, como presunto autor de dos robos cometidos en las localidades de la Zarza y Guareña, donde habían sido sustraídos dos vehículos agrícolas cargados con más de 20.000 kilos de aceitunas, según informó ayer la Delegación del Gobierno de Extremadura. La operación comenzó el pasado día 1, cuando el Puesto de la Guardia Civil de Alange registró la denuncia del robo de un camión cargado con 13.000 kilos de aceitunas, propiedad de la Sociedad Cooperativa Viña Canchalosa de La Zarza.

El autor del delito, había escalado por la puerta de la citada cooperativa y accedió al interior de la nave, donde robó un camión, herramientas agrícolas y utensilios de labranza. El propietario valoró el vehículo sustraído en unos 6.000 euros y en otros tantos el fruto que contenía. Ante la denuncia, la Benemérita montó un dispositivo de búsqueda y el camión fue hallado por los agentes, sin su carga, en el cruce de la carretera Ex-105 con la Ex-105 R, en el término de Alange.

Una vez practicadas las investigaciones oportunas por la Policía Judicial de la Guardia Civil de Mérida y de Almendralejo, pudo saberse que el camión había sido descargado en un almacén de esta última localidad, propiedad del ahora detenido. Tras realizar la inspección en el mismo, en el que ya no se encontraba la aceituna, se hallaron gatos hidráulicos, correas, equipos de música, ropas y utensilios de labranza, sustraídos junto con el camión.

Posteriormente, la Guardia Civil logró esclarecer el robo de un tractor y un remolque agrícola cargado con 8.000 kilos de aceitunas, sustraídos el 24 de diciembre del pasado año en la finca Cazalarga, en Guareña. En este caso, el denunciante valoró el vehículo en 32.000 euros y el fruto en más de 4.000. Se da la circunstancia de que el tractor y el remolque también se recuperaron en el cruce de la Ex-105 con la Ex-105 R, sin contener ya las aceitunas.

La Guardia Civil continúa las investigaciones para averiguar cuál fue el destino de los frutos, aunque se sospecha que, por su gran volumen, hayan sido llevados a almazaras o alguna fábrica de aderezos de aceitunas.