Hemos pasado de no tener vuelos, a tenerlos con horarios regulares y en 2018 con unos horarios que nos van a permitir turismo y negocios». Con esta frase, la consejera de Medio Ambiente, Begoña García Bernal, resumía ayer lo que supondrá el acuerdo firmado el lunes con el Ministerio de Fomento. Ese convenio, que ayer fue aprobado por el Consejo de Gobierno de la Junta y debe ser ratificado también por el Consejo de Ministros, va a permitir dar estabilidad a las rutas aéreas con Madrid y Barcelona y aumentar las conexiones. Y eso, en palabras de la consejera, permitirá dará seguridad a los turistas y a las empresas que quieren trabajar en la comunidad.

El acuerdo anunciado el lunes supone que los vuelos desde el aeropuerto de Badajoz serán una obligación de servicio público (OSP) y ya podrán ser subvencionados directamente por la Junta sin tener que utilizar la fórmula del contrato de publicidad anual que se emplea actualmente porque la ley impide a las administraciones contratar servicios aéreos si no son declarados como servicio público.

De esta forma, el próximo contrato aéreo durará hasta cuatro años, prorrogable por otros cuatro más, y será la Junta la que ponga las condiciones que deben tener lo vuelos, y no las compañías como hasta ahora. Con esta nueva fórmula, el Ministerio de Fomento tendrá que licitar el contrato del servicio aéreo pero seguirá pagandolo la Junta íntegramente: el presupuesto base de licitación será de 3,5 millones de euros al año, 14 millones cuatro años. Con el contrato de publicidad, el servicio actual cuesta 2,1 millones al año pero hay menos vuelos a Madrid y las condiciones son fijadas por la empresa.

IDA Y VUELTA EN EL DÍA / Así, la consejera explicó ayer que la OSP permitirá que cada semana haya once vuelos de Badajoz a Madrid y diez a la inversa y otros cuatro a Barcelona. Los horarios de la ruta con la ciudad condal aún tienen que definirse, pero la conexión con Madrid ya está más clara. Habrá dos vuelos ida y vuelta al día de lunes a viernes y uno de ida el domingo (a las 20 horas). «Saldrá un avión de Madrid a Badajoz entre las 6.30 y 7.30 de la mañana, hará parada técnica media hora y saldrá de Badajoz a Madrid entre las 8 y 9 de la mañana. Por la tarde volverá a salir un vuelo de Madrid a Badajoz entre las 17.30 y 18.30 de la tarde y se volverá a marchar a Madrid entre las 19 y 20 horas», detalló la consejera.

En cuanto a los precios, como ya se indicó el lunes, la Junta fijará un tope a las compañías que participen en el concurso: 90 euros máximo por trayecto a Madrid y 110 euros a Barcelona. No obstante, los precios pueden ser menores en función de la demanda y la compra con antelación (como ocurre ahora), y habrá descuentos para los colectivos que ya tienen ventajas en otros transportes en la región, señaló García Bernal. «La empresa adjudicataria estará obligada a establecer descuentos de hasta el 25% a jóvenes con carnet joven europeo, a mayores de 60 años, familias numerosas, víctimas de violencia de género y personas beneficiarias de prestaciones sociales y económicas públicas». Supondrá que estos colectivos podrán acceder a vuelos por 67 euros (cada trayecto) a Madrid y 82 euros a Barcelona como máximo.

Estas serán algunas de las condiciones que deberán cumplir las empresas que quieran quedarse con el servicio aéreo de Extremadura entre 2018 y 2022 y que deberán presentarse al concurso cuando salga a licitación pública. En principio, se estima que el nuevo servicio OSP empiece a funcionar el 1 de julio. Pero mientras eso ocurre y a la vista de que el contrato aéreo actual termina a principios de 2018, la Junta volverá a sacar en enero el concurso de publicidad para poder mantener los vuelos desde Badajoz los meses que tarde en resolverse el concurso de OSP y, una vez que las rutas ya estén garantizadas, para seguir publicitando Extremadura en el transporte aéreo. Las condiciones y el importe de ese próximo contrato aún no están definidas. Cuando se conozcan, la empresa que actualmente opera en la región, Air Nostrum asegura que «estudiará los pliegos para evaluar la conveniencia de presentarse a la licitación. Esta disposición será también la que mostrará la compañía cuando se conozcan las condiciones de la OSP», indica.

La consejera valoró la nueva etapa que tendrá el servicio aéreo en Extremadura tras convertirse en servicio público. Recordó que los trámites comenzaron en octubre de 2015, cuando se presentó la primera memoria a Aviación Civil para solicitar la declaración de OSP y desveló que dicha memoria ha sufrido cambios hasta en seis ocasiones. «Aquí no se llega ahora por ciencia infusa; sabíamos que cumplíamos los requisitos y hemos realizado un trabajo silenciado para lograr el convenio firmado el lunes. Cuando llegamos no teníamos vuelos y ahora tendremos unos servicios que abrirán Extremadura al turismo y los negocios».