El incendio forestal que afecta a las comarcas cacereñas de La Vera y El Jerte, que se originó el pasado jueves 27 de agosto y que ayer ya estaba estabilizado, ha calcinado 4.169 hectáreas, según la primera estimación de la Junta de Extremadura. El fuego ha afectado a siete términos municipales: Aldeanueva de la Vera, con 2.270,77 hectáreas, Garganta la Olla (1.015,34 hectáreas), Cabezuela del Valle (308,13 hectáreas), Cuacos de Yuste (130,85 hectáreas), Guijo de Santa Bárbara (136,28 hectáreas), Jerte, (291,77 hectáreas) y Tornavacas (16,61 hectáreas).

Por tipo de vegetación, han ardido 2.209 hectáreas de matorral, 1.129 de robledal, otras 417 de pastizal, 361 de hojarasca, 45 hectáreas de terreno no forestal y 6 de ribera, detalla el Ejecutivo regional en un comunicado.

El incendio está aún sin extinguir, en fase estabilizada, y se dará por controlado en los próximos días, si no hay reactivaciones de importancia. Por lo tanto, la estimación de hectáreas podrá variar ya que hay que contrastar perímetros, islas de vegetación sin quemar o arbolado afectado, que hasta ahora no ha podido realizarse.

Ayer continuaban trabajando en la zona varios medios terrestres del Plan de Lucha Contra Incendios Forestales de Extremadura (Infoex) para poder controlarlo definitivamente.

Por otra parte, las Asociaciones Ganaderos de la Vera, Valle del Jerte y Comarcas Nortextremeñas y La Unión calificaron de «intencionado» este incendio y criticaron «el abandono del monte» debido a que no hay actividad agraria. «Para que estos incendios se propaguen con la fuerza y rapidez que han demostrado, se necesita que un irresponsable o delincuente prenda fuego, pero es imprescindible que el monte esté abandonado y lleno de maleza», manifestaron en un comunicado en el que plasmaron las conclusiones de una reunión mantenida ayer en Jaraíz de la Vera.

En este sentido, destacaron que la prevención de los incendios en invierno por parte de la Junta de Extremadura es «nula», y recalcaron que el hecho de que no haya ganaderos, agricultores y pastores en el campo «agrava los incendios, ya que estos son los primeros en divisarlos y controlarlos».

De hecho, aludieron a la intervención de varios ganaderos de Guijo de Santa Bárbara en la extinción del fuego en «los inicios de su propagación, que ha salvado de quemarse a una parte importante en este término municipal».

Asimismo, puntualizaron que ese abandono del monte se produce por la «escasa viabilidad económica» de la actividad agraria, «debido a las campañas brutales de sacrificio de animales en los saneamientos ganaderos». Y subrayaron que «hay intereses bastardos de cambiar la actividad ganadera por la cinegética de manera cíclica todos los años», por lo que, «previos al sorteo de puestos de caza, se producen conatos de incendios».

Así, instarán al Seprona a investigar «posibles responsables, a través de pistas como los beneficios económicos».

Igualmente, advirtieron de la presencia de grandes cantidades de ganado y fauna silvestre calcinadas en los campos, «que es preciso retirar de manera inmediata para evitar la contaminación del agua por los cadáveres putrefactos».