Los vecinos de Santibáñez el Alto tardarán en olvidar la noche del 23 al 24 de agosto del 2013. Esa noche la población quedó cercada por el fuego. "Hemos tenido una suerte enorme para el infierno que hemos vivido", recordó ayer Desiderio Pérez, teniente de alcalde de esta población del norte de Cáceres. El incendio se inició a la una y media de la noche. "Empezó en un solo foco, pero hacía un aire terrible y se empezó a extender, las llamas han llegado hasta las inmediaciones de las casas, aunque afortunadamente no hubo que evacuar a nadie", precisó Pérez a las dos de la tarde de ayer, a esa hora la situación ya estaba estabilizada.

"No hubo escenas de pánico, pero sí de muchísima tensión y sobre todo de mucho miedo, ya que veías como el fuego avanzaba y apenas podíamos contenerlo", subrayaron dos vecinos del pueblo a la agencia Efe. "En un primer momento fueron los vecinos los que participaron en la extinción, lo hacían con lo que tenían a mano, con gomas de regar y cubos", añadió Pérez.

Según informó ayer el Infoex, el incendio se declaró entrada la noche y a las 2.40 horas se tuvo que activar el nivel 1. A las tres de la mañana el fuego había rodeado la población. A esa hora se activó la unidad militar de emergencias por si había que evacuar a los vecinos, ya que las llamas llegaron a las inmediaciones de las casas, afectando también a la carretera de acceso, que se tuvo que cortar al tráfico, una vía que ayer por la mañana se reabrió.

En las labores de extinción intervinieron, entre otros recursos, doce medios aéreos del plan Infoex y del Ministerio de Agricultura, además de camiones, retenes y máquinas pesadas del Infoex, medios del Sepei, del 112 y de la Guardia Civil, entre otros.

Según informó ayer el Gobierno de Extremadura, desde un primer momento se montó un dispositivo con mandos del Infoex y el Cecopi para analizar la situación, reuniones en las que participaron los consejeros de Administración Pública, Pedro Nevado Batalla, y de Agricultura, José Antonio Echávarri, quien se desplazó a la localidad.

Ayer por la tarde, aunque el incendio ya estaba estabilizado y controlado, se mantenía el nivel 2 como medida de precaución y 200 personas seguían trabajando en la zona. En cuanto a la superficie quemada, las estimaciones que ayer por la tarde se manejaban, a falta de conocer la cifra definitiva, eran que se habían quemado aproximadamente unas 150 hectáreas. El incendio ha afectado a una zona de robles, pastos y matorrales.

A causa del humo, 24 personas tuvieron que ser atendidas por los servicios médicos, según apuntó el 112, por irritación en ojos y mucosas, ninguno tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario.