«Hay muchos niños que tienen muchos deberes y entonces con la presión de los padres... Para mí casi es un delito porque matas a un niño por dentro», dice uno de los menores que ha participado en el primer estudio de Unicef sobre la situación de la infancia y la adolescencia en Extremadura. El estudio se presentó ayer en Mérida al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y posteriormente a los medios en una rueda de prensa.

Unicef analiza a lo largo de 86 páginas datos estadísticos de la Administración europea, central y autonómica y de otros estudios e incorpora las opiniones de 44 menores de entre 10 y 17 años de cuatro localidades: Cáceres, Don Benito, Villanueva de la Serena y Herrera del Duque.

La primera temática relevante para estos menores es poder contar con un tiempo para la diversión, frente al programado para el estudio y las tareas escolares y extraescolares, según expuso el director ejecutivo del Comité Español de Unicef, Javier Martos.

Este tiempo libre también se ve limitado por problemas de transporte en las localidades de mayor tamaño para acudir a las extraescolares.

LAS REDES SOCIALES / En este apartado también abogan por la gratuidad en las actividades de ocio y más variedad para ciertas edades, según el estudio, el cual recoge igualmente que los menores son conscientes de la falta de seguridad en el uso de las redes sociales.

La igualdad es la segunda temática en la que más hacen hincapié e identifican la discriminación por homofobia, éxito escolar, género y, en menor grado, por el origen inmigrante.

También se sienten discriminados porque los mayores se creen siempre con la razón y sus opiniones no son escuchadas.

La educación y la salud son las siguientes temáticas prioritarias para ellos.

En su opinión, la escuela es algo más que el lugar donde se va a clase con otros niños, reclaman la mejora de las infraestructuras, las escolarización de 0 a 3 años, becas y mejorar el clima educativo en las aulas.

El estudio constata que existe un discurso distinto sobre la salud entre los niños de la muestra del entorno rural y urbano. Entre los rurales prevalecen necesidades vinculadas con la accesibilidad a los servicios sanitarios, mientras que los niños del entorno urbano se centran en los hábitos saludables.

Los menores expusieron la facilidad para acceder al consumo de alcohol por parte de adolescentes y preadolescentes, sobre todo por el descontrol de los puntos de venta irregulares.

En el apartado de protección social, aunque los niños participantes son conscientes de que existe la «pobreza infantil», su definición de ella como «pobreza extrema» hace que no la identifiquen en Extremadura.

Asimismo, opinan que el acceso al empleo de los adolescentes podría mitigar la situación económica de determinadas familias.