El Ministerio del Interior está convencido de que los 12 antílopes indios hallados en diciembre del año pasado en una finca de Zarza la Mayor iban a ser utilizados en cacerías. Aún así, el ministerio reconoce que no ha encontrado pruebas suficientes que avalen esta sospecha.

En un escrito remitido hace unos días (concretamente el 16 de mayo) por el Ejecutivo central al Congreso de los Diputados, y al que ha tenido acceso EL PERIODICO EXTREMADURA, el Ministerio del Interior explica que "no tiene constancia de la existencia de redes dedicadas a actividades de caza ilegal con especies salvajes exóticas", aparte, claro está, de la desarticulada en Monterrubio de la Serena.

Sin embargo, recuerda que en diciembre una patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) de Valverde del Fresno detectó la presencia de 12 antílopes indios en una finca de la localidad cacereña de Zarza la Mayor. "Se presume --explica Interior-- que los mismos estaban destinados a prácticas de caza mayor", aunque admite que por falta de pruebas físicas "no pudo confirmarse este hecho".

Como ya informó en su momento este diario, los responsables del coto Rivera Baja no tenían ningún documento que acreditase el origen o la posesión de estos ejemplares exóticos, por lo que el Seprona les denunció por infringir las leyes de Contrabando y de Caza de Extremadura, así como el Reglamento de Epizootias.

Lo cierto es que después de que el 23 de diciembre los agentes del Seprona localizasen estos animales, se realizaron numerosas investigaciones en la finca --regentada por la compañía Flogemar SL y dedicada a organizar batidas de caza artificial -- para comprobar si había más animales exóticos en su interior y si se hallaban indicios de que se hubiesen celebrado cacerías. Ahora el ministerio confirma que desde el primer momento sospechó que esos 12 antílopes iban a ser utilizados en una cacería que nunca llegó a celebrarse, quizás debido a la rápida intervención del Seprona.