Izquierda Unida-Mérida ha pedido hoy que asuman responsabilidades por la muerte ayer de un joven de 21 años ahogado en el embalse Proserpina y, en concreto, exige la dimisión del delegado de Deportes, Pedro Blas Vadillo, por la ausencia del servicio de socorristas durante la temporada de baño en el lago.

La coalición ha manifestado que la utilización de este embalse como zona pública de baños requiere la prestación de un servicio de vigilancia y socorrismo que garantice el uso de esta zona de ocio en condiciones mínimas de seguridad para los bañistas, un servicio prestado habitualmente por Cruz Roja.

"La ausencia de este servicio en fechas tan avanzadas como en las que nos encontramos carece de toda explicación lógica", para IU, que critica que "si a estas alturas no se está prestando, es únicamente por la incompetencia del gobierno municipal".

De hecho, "resulta especialmente ilustrativo" que el convenio correspondiente a esta actividad durante 2015 se firmara el 9 de junio y el servicio se empezará a prestar el próximo viernes, día 8.

A su juicio, el fallecimiento de este bañista pone de manifiesto las consecuencias que produce la ausencia de este servicio, ya que existe la "posibilidad de que se hubiera podido evitar esta desgracia si este servicio hubiera estado en funcionamiento".

Según IU-Mérida, "resulta totalmente contradictorio que el mismo Ayuntamiento de Mérida", que garantiza la asistencia de socorristas para la seguridad en una piscina pública, no establezca al menos las mismas previsiones de seguridad en una zona de baño mucho más extensa".

"El hecho es que el daño resulta irreparable y por ello requiere que el gobierno municipal asuma su responsabilidad", insiste la coalición, que muestra sus condolencias a la familia del joven fallecido por la pérdida y el dolor que está sufriendo en estos momentos