Noche de aplausos y levantás entre piedras milenarias. Cinco hermandades completaron en la jornada de ayer su estación de penitencia en la capital autonómica, que vivió la jornada más multitudinaria de su Semana Santa con nueve pasos en la calle. La primera en iniciar el recorrido fue la Cofradía del Prendimiento de Jesús y Nuestra Señora de la Paz, cuyos 60 y 32 costaleros brillaron en la bajada junto al acueducto de San Lázaro al son de los acordes de la banda de la hermandad. La Virgen estrenó el paso y los faldones, las dos ánforas y los cirios, mientras que la talla de Juan de Avalos lució restaurada.

A la misma hora partía de Las Sindicales la Franciscana Hermandad del Cristo de la Vera Cruz y María de Nazaret rumbo a la basílica de Santa Eulalia, donde la patrona de la ciudad y cientos de fieles fueron testigos del Encuentro. De allí salió puntual a las 19.30 la Cofradía del Cristo de los Remedios y Nuestra Señora del Mayor Dolor. Y una hora después abandonaba el mismo templo la Cofradía Ferroviaria con los pasos del Descendimiento y Nuestra Señora de la Esperanza. El Jueves Santo emeritense culminó con la procesión del Cristo del Calvario, talla anónima de 1659 que, en silencio, sacó a la calle la Hermandad del Calvario.

Hoy, Viernes Santo, otras tres hermandades completarán su estación de penitencia. La Cofradía Ferroviaria saldrá de la Basílica de Santa Eulalia las 11 con la Virgen de las Angustias y Nuestra Señora de la Esperanza, uno de los recorridos más hermosos de la Semana Santa emeritense para seguirlo al completo. Ya por la tarde, a las seis, la Hermandad del Calvario procesionará con el Cristo Yacente y la Virgen de los Dolores, y a partir de las doce de la noche hará lo propio con la Virgen en su soledad.

Esta noche se celebra además el vía crucis en el Anfiteatro Romano, después de la procesión con voto de silencio del Cristo de la O.