La Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía ha aprobado la autorización previa para la instalación de 65 parques eólicos en la región, que suman una potencia instalada de 977 megavatios distribuidos en 381 aerogeneradores. A partir de ahora tienen seis meses para presentar el proyecto de ejecución y el estudio de impacto ambiental para conseguir la autorización administrativa definitiva por parte del Gobierno extremeño, que ya tienen 26 proyectos que datan del año 2007 y a los que se pueden unir otros seis más, los afectados por un recurso presentado por el anterior Ejecutivo regional y que obtuvieron una sentencia favorable del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura. Ahora, la Junta no va a recurrir esa sentencia, por lo que se unen a las iniciativas eólicas. Con ello, ya son 97 las autorizadas en toda la región, con una potencia de 1.691 megavatios. Todos estos proyectos están pendientes ahora del registro de preasignación que debe abrir el Ministerio de Industria, y "si les resulta atractivo a los promotores, los llevarán a cabo", ha indicado esta mañana el consejero de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía, José Antonio Echávarri, que ha informado del proceso, y que se muestra optimista sobre este tipo de energía en la región porque "los promotores han mostrado su interés y deseaban que se resolviera esta autorización previa".
De los 65 parques con autorización previa aprobados ahora, 50 han optado por la opción de destinar el 8% de su facturación sin IVA a los ayuntamientos y mancomunidades de la zona donde están proyectados, y 15 por la modalidad de crear tres empleos por megavatio de potencia instalada. Buena parte de ellos se han decantado por la zona de Brozas, Millanes, Vladehúncar, Plasencia, Monesterio y Zalamea de la Serena. En total, al amparo del decreto 160/2010 se habían presentado 231 proyectos, pero se han rechazado 156 por problemas medioambientales y 16 porque en la zona ya hay otras plantas generadas.
Echávarri no se atreve a avanzar plazos sobre cuándo estarían instalados algunos de esos parques en la comunidad autónoma, porque todo dependen del decreto del Gobierno central y de la rentabilidad que vean o no los promotores, pero espera que esta energía alternativa sea una realidad como lo es ya la termosolar, con 6 plantas en funcionamiento. La Junta, insistió, apuesta además por la biomasa. De hecho, la planta de ENCE en Mérida ya está muy avanzada y hay otras cinco iniciativas en la zona de Campo Arañuelo, con 250 megavatios de potencia, que podrían ser una alternativa al tabaco, aunque todo está en el aire a la espera de si pueden compensar la rentabilidad de este cultivo y de si los agricultores podrían mantener o no las ayudas que reciben de la PAC.
