La Junta de Extremadura va a convocar este año oposiciones para 100 plazas de Infantil y Primaria de todas las especialidades. La consejera de Educación, Trinidad Nogales, se reunió ayer con la mesa técnica de educación, en la que están presentes los sindicatos, para anunciarles una noticia que estos demandaban desde hace semanas, dado que correspondía este año la celebración de oposiciones a este cuerpo de enseñanza, de acuerdo con la periodicidad que se viene registrando en la región en los últimos años.

Nogales aseguró que para tomar esta decisión se ha tenido en cuenta que otras comunidades han convocado oposiciones y que se ha apurado el límite de reposición fijado por el Gobierno central para contener el gasto público. Los sindicatos se manifestaron ayer entre la alegría por que se confirme la convocatoria, en el aire sobre todo después de que el año pasado no se celebrara la de Secundaria, y las críticas por considerarla insuficiente y tardía.

Nogales aseguró que el Ejecutivo extremeño ha querido hacer pública cuanto antes la decisión para favorecer a los potenciales opositores, y que tengan suficiente tiempo para prepararse antes de los exámenes. También confirmó que las pruebas serán en verano, como es habitual, sobre todo por que los miembros de los tribunales lo son también del cuerpo docente, y por el sistema ordinario, una vez que ha finalizado el plazo establecido en la Ley Orgánica de Educación (LOE) de otro transitorio que beneficiaba a los interinos (porque primaba la experiencia) y que pretendía reducir su número.

CONSENSO ESTATAL La Junta es favorable a que todas las comunidades consensúen sus decisiones sobre las oposiciones, destacó la consejera. En esa línea, aseguró que Extremadura sigue el ejemplo de comunidades limítrofes como Castilla-La Mancha, que fue la primera en noviembre en anunciar que convocaba más de 200 plazas de maestros o Castilla y León, que se ha mostrado favorable a realizar oposiciones para este cuerpo docente este año, después de no hacerlo el pasado.

Nogales resaltó que el Gobierno regional ha sido prudente siempre buscando favorecer a los opositores y citó como ejemplo de lo contrario a Andalucía, que convocó 2.400 plazas para Secundaria el año pasado en unas oposiciones que fueron suspendidas cautelarmente por el Supremo. Antes habían sido recurridas por el Gobierno central por no ajustarse a la tasa de reposición estatal, del 10% de los puestos que queden libres por jubilaciones, sobre todo, u otro motivos (fallecimientos, sanciones...).

Los sindicatos valoraron la convocatoria entre la comprensión ante el obligado cumplimiento de la tasa estatal y las críticas por plegarse a unos recortes que deterioran la enseñanza pública. Para CCOO es "una paupérrima oferta pública de empleo docente", UGT la considera "muy insuficiente", el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (STE-Ex) va más allá y a ese calificativo añade los de "confusa y un mero lavado de cara" y PIDE advierte que a la escasez del número de plazas se suma la "premura" de las fechas y la "indefinición" del Ministerio sobre el temario y sistema de oposición.

Más comprensivos se muestran en ANPE, que "celebra" la convocatoria si bien lamenta la obligatoriedad de la tasa de reposición. También Manuel Pascual, presidente de Enseñanza de CSIF, señala que "la valoración no puede ser más que positiva", porque sacando las plazas se atiende a la demanda sindical de su necesidad, si bien entiende que deberían convocarse más plazas. No obstante, igual que Saturnino Acosta, secretario de Organización de de ANPE, insiste en que se debía haber forzado más para subir el número de plazas, sin incumplir la tasa de reposición aprovechando, por ejemplo, que en otros cuerpos funcionariales no se van a convocar oposiciones.