Nuevo intento por que fluya el crédito en la región. El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó ayer una línea de ayudas que establece subvenciones directas de entre 5.000 y 7.500 euros o créditos de hasta 15.000 convenidos con las entidades bancarias a un interés "ajustado" para financiar a las microempresas extremeñas. Según explicó la vicepresidenta y consejera de Empleo, Empresa e Innovación, Cristina Teniente, se trata del programa más importante del Plan de Autónomos rubricado en febrero con las asociaciones del sector y está dotado con 15 millones de euros. Su aplicación "supondrá un impulso para el tejido empresarial" al facilitar, según las previsiones de la vicepresidenta, la constitución de 2.500 autónomos nuevos y la puesta en movimiento de 45 millones de euros en la economía regional.

Las ayudas están destinadas a los desempleados que se establezcan como autónomos --es necesario que presenten un plan de viabilidad económico elaborado por una gestoría-- y los empresarios que quieran incorporar familiares colaboradores a su negocio. En ambos casos, podrán optar por una subvención directa de 5.000 euros (se elevará hasta los 7.500 para las mujeres y los hombres parados con discapacidad o menores de 30 años y mayores de 50) que se pagará a través de la Hacienda regional o las entidades bancarias o la firma de un crédito de hasta 15.000 euros subsidiado al 50% por la Administración.

CONDICIONES Sobre estos últimos, Teniente explicó que las condiciones de devolución se establecerán en unos convenios que el Gobierno regional firmará en breve con las entidades financieras que se adhieran al programa, pero asegura que el interés será "ajustado", que las comisiones en ningún caso superarán el 1% y que el plazo de amortización es de a cinco años. Además, se concederá también una ayuda extra de 345 euros para cubrir los gastos de la constitución del crédito y la aportación del aval a través de la sociedad pública Extraval.

"Se trata del programa más importante del Plan de Autónomos, con ayudas adaptadas a las necesidades históricas que demandaba el sector y que responden bien a su expectativa", manifestó Teniente, que apuntó que las empresas beneficiarias tendrán la obligación de mantener su actividad y domicilio fiscal en la región al menos en los dos años siguientes al pago de la ayuda.

Este nuevo programa, cuyo último objetivo es dar financiación y liquidez a las microempresas, se complementa con las medidas aprobadas anteriormente por el Consejo de Gobierno, como las ayudas para sufragar los costes que supone la elaboración del plan de viabilidad para el negocio que se quiere poner en marcha y las bonificaciones al 100% en los pagos a la Seguridad Social y las tasas municipales durante los dos primeros años.