Aún no hay sentencia firme y se puede recurrir, pero de momento la justicia ha dado la razón a la cinco empleadas del sector de la limpieza que demandaron a las empresas Eulen y Palicrisa (a la que pertenecían antes de ser subrogada) por discriminación salarial. Denunciaron que durante casi 35 años les ha sido negado el plus de toxicidad que debían cobrar por el trabajo que desarrollan en el hospital Perpetuo Socorro de Badajoz, que implica la recogida de residuos sanitarios (jeringuillas, gasas, material quirúrgico...). Y que además ese complemento sí se lo abonan a sus compañeros incluso sin hacer esas labores. La diferencia económica es de hasta un 30% del sueldo, unos 215 euros en cada nómina.

Ahora la justicia ha hablado posicionándose del lado de las demandantes y condenando a ambas empresas a tener que pagar una indemnización por daños morales y materiales. Tal y como defendía la abogada de las trabajadoras, Estrella Santiago, «se trata de un caso de vulneración de los derechos fundamentales» porque supone recibir un salario inferior por el simple hecho de ser mujer, ya que tienen la misma categoría y realizan la misma función.

UNA INJUSTICIA HEREDADA

La situación de discriminación salarial se inició con Palicrisa (una empresa con sede en Badajoz) y esas mismas condiciones laborales las heredó después Eulen (una firma internacional con delegación en Extremadura), por lo que la defensa de esta última se basa en que ese plus de toxicidad que sí cobran los empleados -y no ellas- se trata de derechos adquiridos que no se pueden quitar. También argumentaban que las limpiadoras ya no hacían labores que implicaran riesgo o peligrosidad; pero la abogada mantiene que la tarea de estas cinco empleadas sigue siendo la misma. De momento, la sentencia es negativa para las dos empresas.

El juicio se celebró el pasado 29 de mayo en el juzgado número 1 de lo Social, en Badajoz, y ahora se abre el plazo para presentar recurso.

«Estamos muy contentas, el resultado es positivo», manifestaba ayer Estrella Santiago, que lleva estudiando el caso desde agosto de 2017.

Tras la celebración del juicio la abogada manifestó que la demanda se puede ampliar «porque hay más mujeres afectadas por esta situación de discriminación salarial».