LAS QUE SE INCORPORAN: Campilobacteriosis; criptosporidiosis; dengue; encefalitis transmitida por garrapatas; encefalopatía espongiforme transmisible humana; enfermedad invasora por Haemophilus influenzae; enfermedad neumocócica invasora; enfermedad por virus Chikungunya; fiebre del Nilo occidental; fiebre hemorrágica vírica (incluye el virus del ébola, entre otras); giardiasis; gripe (casos graves ingresados); herpes zoster; hepatitis C, infección por Chlamydia trachomatis; infección por Escherichia coli productora de toxina shiga o vero; Infección por virus de la inmunodeficiencia humana / sida; leptospirosis; linfogranuloma venéreo; listeriosis; rubéola congénita; salmonelosis (excluye fiebre tifoidea y paratifoidea); shigelosis; síndrome respiratorio agudo grave; tétanos; toxoplasmosis congénita; viruela y yersiniosis

LAS QUE PERMANENCEN:

Botulismo; brucelosis; carbunco; cólera; difteria; enfermedad meningocócica; fiebre amarilla; fiebre exantemática mediterránea; fiebre Q; fiebre recurrente transmitida por garrapatas; fiebre tifoidea y paratifoidea; gripe; hepatitis A; hepatitis B; hidatidosis; infección gonocócica; legionelosis; leishmaniasis; lepra; paludismo; parotiditis; peste; poliomielitis; rabia; rubéola; sarampión; sífilis; sífilis congénita; tos ferina; triquinosis; tuberculosis; tularemia y varicela.