Más de 2.500 tabaqueros (1.800 según la policía y 3.000 según los convocantes) se manifestaron ayer en Mérida para exigir a la Junta que abra un diálogo con los productores para debatir el futuro del sector. Los cultivadores, convocados por UPA, Coag, Asaja y Unexca, acusan al Ejecutivo regional de haberles marginado en la negociación, y de avalar una reforma que les deja en manos de las transformadoras y compromete la viabilidad de las pequeñas y medianas explotaciones.

La marcha partió del Paseo de Roma para dirigirse a la sede de Presidencia, y, desde ahí, cruzar el puente y acabar frente a la Consejería de Agricultura. El secretario regional de UPA, Ignacio Huertas, señaló que su principal reivindicación pasa porque la Administración regonal abra un diálogo con las organizaciones profesionales y cooperativas.

"Queremos decirle a la sociedad que los tabaqueros quieren seguir produciendo, pero que ha habido cambios que necesitan decisiones para proteger a los pequeños y medianos productores", comentó, y añadió que "desaparecen las cuotas, lo que puede provocar penalizaciones para los más débiles, y con el nivel de desacoplamiento que se ha marcado, nos podemos encontrar que no puedan negociar equilibradamente con las industrias".

Huertas manifestó que, con el planteamiento actual, sólo podrán seguir produciendo las grandes superficies, "y hay 4.000 familias que viven en los pueblos y necesitan un futuro".

SALIDA DIGNA Por su parte, Luis Cortés, de Coag, reclamó "que cesen las mentiras del consejero de Agricultura (José Luis Quintana) y la consejera portavoz (Lola Pallero), porque queremos producir tabaco, pero no regalarlo, sino venderlo a un precio digno, y queremos sentarnos con las industrias y la consejería para decidir el futuro del sector".

Cortés indicó que "no buscamos coger el dinero y salir corriendo, eso lo hará el consejero, sino que, si hay agricultores que no pueden producir porque no les contratan, se les dé una salida digna".

El dirigente agrario añadió: "Queremos producir, el problema es que las industrias han dicho que no garantizan la compra de tabaco el próximo año". A su juicio, "son los productores que tienen que decidir, no el foro que se han inventado con gente que pinta poco".

GARANTIAS Mientras, el secretario regional de Asaja, Angel García Blanco, manifestó su rechazo a la desaparición de las asociaciones de productores y el sistema de cuotas, y añadió: "Queremos cultivar con dignidad, con un precio comercial que sea suficientemente atractivo para que los cultivadores puedan seguir". Blanco instó a Quintana a sentarse a negociar. "Si no, está dando la espalda a Extremadura y a la economía agraria de toda la región".