La negociación comienza ahora". Después de tres rondas de reuniones entre la Junta de Extremadura y los grupos parlamentarios, Guillermo Fernández Vara y José Antonio Monago tuvieron ayer el primer cara a cara para tratar de llegar a un acuerdo que permita sacar adelante los presupuestos autonómicos para 2016, ya que al PSOE le bastaría, al menos, con la abstención del PP. Tras salir del encuentro que tuvo lugar en la sede de la Presidencia, y que se prolongó por espacio de dos horas, el líder de los populares destacó "la disposición del Gobierno y el esfuerzo que está haciendo" para alcanzar un entendimiento presupuestario. Por su parte, el presidente extremeño declinó hacer declaraciones y lo hará una vez finalice la ronda de contactos que retomará el lunes con Alvaro Jaén, líder de Podemos; y con María Victoria Domínguez, portavoz de Ciudadanos, el martes.

"Aquí hay diálogo y ese es el clima que nos exigen los extremeños", manifestó Monago, quien puntualizó que al no haber una mayoría absoluta tras el resultado de las pasadas elecciones autonómicas "lo que cabe es coger una herramienta que es el diálogo, y eso es lo que estamos planteando en estas reuniones". El líder del PP, que situó el encuentro dentro de la "normalidad democrática en momentos de dificultad", subrayó la disposición de su partido y de los socialistas para hablar de todo, incluida la reforma tributaria, e "intentar buscar el encuentro". Monago, que no quiso entrar en detalles, apuntó que durante la reunión se habló de "lo que nos gusta más y de lo que nos gusta menos", en líneas generales.

"La negociación empieza a andar ahora, por así decirlo, y no podemos avanzar cuál será el resultado final, pero sí la voluntad del PP de tener por delante más que el interés electoral, el interés general de los extremeños", señaló Monago, que volverá a reunirse con Vara la próxima semana para seguir trabajando en esta cuestión, aunque la fecha aún no está fijada. Para el líder de la oposición, el nuevo presupuesto "tiene que tener muy en cuenta los sectores productivos" y la economía de la región, por lo que apeló a la necesidad de aprobar una cuentas "sostenibles" que sigan "garantizando" la llegada de fondos a la región, además de "mejorar la recaudación y el empleo". En cualquier caso, los populares ya habían adelantado que para alcanzar un acuerdo fructífero en la negociación el Gobierno regional tendría que respetar el decálogo que han propuesto de cara a las cuentas, y que contempla como prioridad irrenunciable que no se produzca una subida de los impuestos en el próximo ejercicio presupuestario.

CAMBIO TACTICO La cita entre Vara y Monago se produce después de que ambos partidos acercasen posiciones tras las dos reuniones mantenidas con anterioridad entre el equipo de la consejera de Hacienda, Pilar Blanco-Morales, y la delegación del PP encabezada por la diputada Cristina Teniente, que también acompañó ayer al líder de los populares. Con esta puesta en escena, Blanco-Morales da paso al jefe del Ejecutivo regional para liderar las conversaciones con los grupos parlamentarios.

"Se trata de hacer un alto en el camino, ver las propuestas y las posibilidades de avance que existen con cada grupo hablando con sus máximos responsables y a partir de ahí analizar si cabe el acuerdo", manifestó Vara el pasado jueves en declaraciones a este diario. Además, el socialista ya avanzó que esperaba que en las próximas semanas se cerrara un acuerdo que pueda ir ya al Parlamento extremeño para que en el tercer trimestre de este año se aprueben las cuentas autonómicas para el 2016.

A expensas del resultado de los encuentros que se desarrollen la próxima semana con el resto de grupos parlamentarios, Blanco-Morales afirmó tras las reuniones que mantuvo esta semana con Podemos y Ciudadanos que habían supuesto "un avance" y confió en "llegar a ese mínimo común denominador en defensa de los intereses de los extremeños".