El nivel de ejecución presupuestaria de la Junta de Extremadura se situaba al finalizar el pasado mes de agosto en el 53,75%, con un total de 2.623,5 millones de euros gastados de un total algo superior a los 4.881 millones, de acuerdo a los datos dados a conocer ayer por el Ministerio de Hacienda. En el conjunto de las comunidades autónomas, durante los ocho primeros meses del año el porcentaje de obligaciones reconocidas sobre los créditos totales se situó en el 55,47%.

Los porcentajes más bajos de ejecución en la comunidad autónoma corresponden a los apartados referentes a inversiones reales, donde el acumulado del año era solo del 20,37% (62,92 millones de euros de 308,96) y al de transferencias de capital (40,75 millones de 246,48).

En cuanto al capítulo de ingresos, hasta agosto el nivel de ejecución presupuestaria era del 56,15% en Extremadura, algo más de tres puntos inferior al promedio nacional (59,71%). Con unas previsiones definitivas de 4.880 millones de euros, los derechos reconocidos ascendían a 2.740,36 millones de euros. De ellos, un 98,66% eran recaudación del ejercicio corriente.

Dentro de este epígrafe, las variaciones más significativas respecto a las cifras registradas en el mismo periodo del año pasado eran la caída del 22,45% en la recaudación del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, hasta totalizar 15,2 millones de euros (correspondientes al ejercicio en curso); y el aumento de casi el 14% en el impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITP y AJD), con 62,15 millones de euros recaudados.