«No desarrollamos tiendas al uso», resume José Ramón Lledó, director de Grupo Dolle, la firma a la que pertenecen 9noventay9 de De5en5, a la hora de explicar las razones que están detrás de la buena marcha de estas dos marcas. Con apenas un lustro de existencia, entre ambas suman ya alrededor de setenta establecimientos abiertos, seis de ellos en Portugal (repartidos entre Lisboa, Oporto, Chaves y Penafiel).

La primera de estas enseñas en echar a andar fue 9noventay9, en el año 2014. «Salió al mercado con la intención de no ser una marca de moda tradicional, sino de cubrir una serie de necesidades que había en el mercado», precisa Lledó. Su mayor particularidad es que dentro de su catálogo se incluye tanto la ropa premamá como la ‘curvy’. No obstante, precisa Lledó, «no es una tienda de tallas grandes, sino que la misma prenda que está en la XS también está en la 4XL». Todos los artículos se comercializan a tres precios 9,99, 19,99 y 29,99 euros. «La relación calidad precio es inmejorable», asegura el director de este grupo con sede en Mérida, que considera que los resultados de esta franquicia han sido «brutales»: a día de hoy cuenta con unos cuarenta establecimientos (cuatro de ellos en Portugal) y el objetivo es que en el transcurso de este año se culminen otras 16 aperturas más (ya hay dos firmadas, en Portugalete —Vizcaya— y Villanueva del Ariscal —Sevilla—).

De5en5 nació un año después, «por la demanda de nuestros clientes de 9noventay9». A diferencia de esta, ofrece artículos tanto para chica como para chico. Se trata de ropa juvenil, calzado, bisutería, y complementos contemplando también las tallas grandes. En este caso, el abanico de precios es algo mayor: parte de los cinco euros y llega hasta los 45. El número de puntos de venta ronda la treintena. Si se cumple el objetivo de expansión, este ejercicio finalizará sumando ambas marcas con una facturación conjunta de 7,2 millones de euros entre todos los locales, que generarán unos 120 empleos.

Acompañamiento «total»

Grupo Dolle cuenta con otras franquicias como Petit Dreams y La Casita de Kitty (esta ya no la comercializa, aunque sigue habiendo establecimientos). «Todo lo que tenga que ver con la franquicia, lo tocamos», remarca Lledó. Y es precisamente «el paraguas de protección» que se ofrece al franquiciado uno de los aspectos que más destaca de su trabajo. «Nuestra empresa cubre absolutamente todos los departamentos posibles: márquetin, compras, administración, tendencias, diseño, redes sociales,… todo», arguye. Un acompañamiento que incluye la elección de la ubicación del establecimiento. «Somos la única marca del mercado, dentro de nuestro sector, que nos desplazamos a ver el local. No delegamos esa responsabilidad porque se trata de una decisión fundamental para el buen desarrollo del negocio».