Camarero, socorrista de piscina, dependiente de tienda... La llegada del verano trae consigo nuevas oportunidades de encontrar empleo. Pero las empresas de trabajo temporal (ETT) advierten: el empresario sigue poco dispuesto a contratar y, aunque las ofertas repuntan durante estos meses respecto al resto del año, las posibilidades de trabajar seguramente vayan a ser menores que en años precedentes.

Auxiliares administrativos para cubrir las sustituciones de los empleados que se van de vacaciones, comerciales para venta de productos, cajeros, dependientes, recepcionistas de establecimientos de alquiler de coches, carretilleros y mozos de almacén: esas son básicamente las ofertas laborales que las empresas de la región están trasladando a ETTs como Adecco. Es decir, trabajos centrados en el sector servicios y para los que se requiere baja cualificación. "Aunque también hay demanda de teleoperadores con conocimientos de idiomas y de ingenieros industriales", apunta el director provincial de esta empresa en Badajoz, Cecilio del Cid.

El gran problema es que a la escasez de oferta laboral se suma la abundancia en la demanda. Con más de 125.000 parados en la región, en Adecco advierten de que la competencia por conseguir estos trabajos --antes muy devaluados-- se ha disparado: "antes eran para estudiantes que querían ganar algo de dinero para sus propios gastos. Ahora, a estos, se suma un elevado número de parados con baja cualificación e incluso personas con formación universitaria que ven en estas ocupaciones un respiro ante la falta de expectativas laborales". Por esta ETT "pasan familias al completo a dejar sus currículos porque están todos sus miembros en paro", cuenta Del Cid.