Un garaje para feriantes. Solitaria de noche y rodeada de actividad comercial de día, la nave del polígono industrial de Charca Musia en la capital cacereña, donde fueron detenidos los cinco presuntos narcotraficantes junto a un menor por un grupo de geos , está situada en el número 18 de la calle Mar Artico.

Con una fachada de ladrillo visto y una gran puerta metálica por la que los agentes de la unidad de élite de la Policía Nacional entraron en la madrugada del pasado lunes al martes, la nave llama la atención porque parece abandonada en la vía con mayor tránsito de vehículos comerciales de este polígono, situado al sur de la capital cacereña en la salida hacia la carretera de Miajadas. Ayer no había señales de que tuviera que haber sido forzada ni tampoco ninguna señal de que estuviera precintada.

En las instalaciones de Mar Artico, a escasos 200 metros de la charca que da nombre al polígono, pernoctaban los cinco detenidos cuando fueron capturados por los agentes. Trabajadores de la zona consultados ayer por este diario no vieron ni escucharon nada. Solo uno de ellos aseguró que vio salir a una persona esposada cuando llegó a trabajar a las ocho de la mañana del pasado martes. A esa hora los geos ya habían hecho su trabajo. Con precisión, llegando incluso a apuntar con sus armas a los presuntos narcos cuando lograron entrar en la nave.

Ausencia de carteles

Utilizada como almacén para caravanas de feriantes, según explicaron ayer vecinos de la zona, estas instalaciones también eran utilizadas como vivienda. Al menos eso se deduce de los testimonios de los trabajadores del polígono, que aseguran haber visto entrar y salir a personas de la nave industrial.

Tampoco hay luminosos ni carteles en la fachada principal, a diferencia de los negocios que la rodean, a plena actividad ayer por la tarde. Sin embargo, las puertas estaban cerradas ayer a cal y canto en el lugar donde se practicaron todas las detenciones.

La discreción con la que agentes de Madrid y Cáceres llevaron a cabo la operación, que se definió durante el pasado fin de semana, no levantó sospechas entre los negocios del polígono. "No hemos notado nada extraño. Tampoco más policía", afirmaban ayer en un taller mecánico.

También aseguraron que no habían observado nada anormal en la zona durante las últimas semanas, aunque sí reconocieron que la nave no tiene actividad comercial a diferencia del resto de Mar Artico. Era la otra feria del polígono.