La historia de Extremadura desde 1923 hasta la actualidad, a través de 95 imágenes con los hitos más importantes vividos en este periodo, se encuentra desde hoy en la sala Vaquero Poblador de Badajoz.

95 imágenes. Retratos de Extremadura, 1923-2018 es el título de la exposición que hoy ha sido inaugurada por el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Angel Gallardo, y el director del Periódico Extremadura, Antonio Cid de Rivera, quienes han destacado el valor de estas imágenes.

A través de fotografías de este rotativo, se retrata la evolución de la comunidad autónoma, y se rinde también un homenaje a los fotoperiodistas, capaces de captar el momento que configura un hecho noticioso.

Las fotos expuestas resumen aquellos hechos o hitos que están en la memoria colectiva de los extremeños, entre ellos los años de la II República, el alzamiento militar, la Guerra Civil y la posguerra, la llegada de la democracia y de la comunidad autónoma, movilizaciones importantes en el conjunto de la ciudadanía, sucesos o distintos hechos relevantes.

Así, se pueden ver desde la riada de Badajoz en 1997 o la protesta contra la central nuclear de Valdecaballeros a las visitas ilustres a Extremadura, el castigo del terrorismo de ETA, los grandes movimientos sociales o los acontecimientos deportivos que marcaron distintas etapas de la historia autonómica.

Gallardo ha señalado que la muestra se compone de momentos, pues "una imagen vale más que mil palabras, y la inmensa mayoría de los acontecimientos, ya sean felices o trágicos, se reflejan en estas instantáneas".

En este sentido ha destacado la importancia del fotoperiodista "al estar al frente de su cámara, recogiendo el momento y la importancia que tiene para la vida de la gente, de la comunidad autónoma".

El famoso corresponsal de guerra y fotoperiodista Robert Capa, como ha recordado Antonio Cid de Rivera, decía que "si una foto no es suficientemente buena, es porque no estabas suficientemente cerca", de ahí que a la complicación de conseguir una buena imagen se añada el hecho de que su autor se informe previamente del acontecimiento a fotografiar.