Caen los contagios pero repuntan las muertes, que superan ya a las de la primera ola. La región notificó ayer 279 nuevos casos de coronavirus y cinco fallecidos que elevan a 1.044 el total de víctimas desde el inicio de la pandemia. Los positivos se reducen con respecto a la jornada previa (el jueves se notificaron 548, la cifra más alta desde el pasado 6 de noviembre y el tercer peor registro de la crisis sanitaria), pero la situación sigue siendo muy preocupante y la curva de incidencia acumulada del virus a 14 días no para de subir: 371 casos por cada cien mil habitantes, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, correspondientes al día 24.
En la última jornada también repuntan las muertes, pues los cinco fallecidos notificados ayer son la cifra más elevada en dos semanas. Se trata de un varón de 90 años de Garciaz, dos mujeres de 84 y 73 años de Villanueva de la Serena, una mujer de 87 años de Santa Amalia y otra de 84 de Badajoz.
El jueves fueron otros cuatro muertos (un varón de 75 años de Zarza de Granadilla, una mujer de 92 de Villanueva de la Serena, un hombre de 89 de Badajoz y otro varón de la misma edad de Aceuchal) y con ellos la mortalidad de la segunda ola supera ya a la de la primera. Desde el inicio de la crisis sanitaria han sido 1.044 las personas que han perdido la vida a causa del covid en Extremadura y 525 lo han hecho desde el mes de junio hasta ayer, frente a los 519 fallecidos que dejó la primera ola.
Con respecto a la situación de los hospitales, el parte remitido ayer por la Consejería de Sanidad refleja un leve aumento en el número de pacientes hospitalizados: sube hasta 190, ocho más que el jueves. La presión se deja notar especialmente en el Área de Salud de Cáceres con un total de 82 pacientes ingresados. Le sigue de lejos Badajoz con 31 y Mérida con 24. Por lo que respecta a las UCI, son 25 las camas covid ocupadas, una más que ayer. En este caso la mayor presión está en Badajoz, con un total de ocho enfermos en cuidados intensivos.
SITUACIÓN «MUY GRAVE» / En un comunicado emitido el pasado jueves, la Consejería de Sanidad aseguró que la situación en Extremadura es «muy grave» y nuevamente apeló a la «máxima responsabilidad» de la sociedad extremeña para no bajar la guardia en el cumplimiento de las medidas de protección individual y colectivas. El impacto de la Navidad aún no está reflejado en los datos de evolución de la pandemia, que previsiblemente comenzarán a empeorar aún más a partir de la próxima semana. El Ejecutivo ya ha advertido que se podría elevar el nivel de alerta incluso del tres al cuatro, pues se parte de un escenario que ya es de riesgo extremo con una incidencia acumulada de 371 casos por cada cien mil habitantes en los últimos 14 días.
Por municipios, los que presentan una peor evolución son Fuente del Maestre (ayer sumó otros 15 casos positivos), Calamonte y Talayuela, donde la incidencia supera los mil casos por cien mil habitantes. Por encima de 500 están Acehuchal, Cáceres, Moraleja, Montijo y Villanueva de la Serena. También preocupan por superar a la media Almendralejo, Navalmoral, Miajadas, Plasencia y Badajoz. En las últimas 24 horas, hay que destacar también los nueve positivos que suma Casar de Cáceres, los cinco de Azuaga y los cuatro de Villafranca.
Por lo que respecta a los brotes, el total de los que están activos se mantiene en 89. El jueves no se notificó ni se cerró ninguno y ayer se comunicó uno nuevo en Don Benito (siete positivos y 13 contactos), pero se cerró otro en Zafra. Con respecto a las altas, se notificaron 89, por lo que el acumulado se eleva a 30.592.
Olivenza: 21 casos con origen en un bar
Olivenza: 21 casos con origen en un barLas autoridades sanitarias han decretado el cierre de un bar de copas de Olivenza tras detectarse 21 casos positivos de coronavirus en el municipio. Según explicó ayer el alcalde, Manuel González Andrade, se ha comprobado que todas las personas que han resultado contagiadas estuvieron el pasado sábado 19 de diciembre en este local, donde presuntamente no se cumplieron las medidas sanitarias. La mayor parte de los contagiados tienen menos de 30 años.
Según la resolución de la Dirección General de Salud Pública, con fecha del 24 de diciembre, se decreta «el cierre temporal de las instalaciones del Bar La Gosadera para el desarrollo de su actividad al público». En el texto se detalla que, para preservar la salud pública, es imprescindible identificar a las personas que hayan tenido contacto con casos de infección. En un local de estas características, añade, «no es posible identificar a los clientes que puedan tener contacto con los trabajadores por la necesidad de anonimato de aquellos, lo que imposibilita su posterior seguimiento y control y, por tanto, es imposible garantizar la ausencia de riesgo para terceros y conlleva el riesgo de que se pueda generar un brote descontrolado en la comunidad».
Por ello se decreta el cierre preventivo del establecimiento por tiempo indefinido, después de que los servicios de rastreo hayan concluido que el bar fue el foco de contagio. El cierre se prolongará hasta que se emita un informe favorable sobre la situación epidemiológica.
«Cuando estábamos en una situación de relativa tranquilidad y aún no habían llegado los días de mayor afluencia de gente por la Navidad, ayer nos sorprendimos con nuevos 20 casos.
Lamentablemente no serán los únicos, saldrán otros tantos», afirmó González Andrade, que ya avisó de que los próximos días «van a ser duros». «Por la irresponsabilidad de unos pocos volveremos a pagar todos», dijo
