El presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, se mostró ayer de acuerdo con la propuesta de que Cáceres y Badajoz se unan por autovía, tal y como ayer insistía el alcalde cacereño, José María Saponi, aunque no mediante la EX-100 sino aprovechando las obras de conversión en autovía de la N-630. "Yo estoy de acuerdo en que Cáceres y Badajoz se van a unir por autovía, ya están unidos Badajoz y Mérida y como parece que el Gobierno va a hacer la autovía Mérida-Cáceres, pues ya tenemos autovía".

Sin embargo, añadió que "si Saponi cree que el Gobierno no la va a hacer entonces estudiaré la otra alternativa". En este sentido, dijo que "la idea es que se unan Badajoz y Cáceres por autovía. Saponi no dice que tenga que ser por un sitio u otro y la diferencia será de cinco minutos".

En opinión del presidente extremeño, "la diferencia entre unir Badajoz-Cáceres por la autovía Badajoz-Mérida-Cáceres serían 110 kilómetros y unirlas por el otro sitio --la EX-100-- serían 92 kilómetros". "Nadie --dijo-- con dos dedos de frente puede gastarse 100.000 millones de pesetas para que tardemos de Badajoz a Cáceres cinco minutos menos", informa Ep.

Por otra parte, a preguntas de los periodistas, el presidente del Ejecutivo autonómico avanzó su participación en el pleno monográfico del próximo 12 de febrero en la Asamblea para debatir sobre el empleo.