La Consejería de Sanidad y Consumo, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, participa en dos estudios de ámbito nacional en los que se analizan aspectos relacionados con la seguridad de los pacientes atendidos en los centros sanitarios de todo el país. Según explicó en un comunicado el director general de Formación, Inspección y Calidad Sanitarias de la Junta, José María Vergeles, el trabajo en la seguridad de pacientes y profesionales "es una de las líneas que deben ser prioritarias en todos y cada uno de los planes de calidad de los servicios sanitarios".

Uno de los estudios se centra en valorar si la utilización de los medicamentos en los centros hospitalarios se ajusta a las mejores pruebas científicas. El fin es minimizar en lo posible la presencia de efectos adversos en relación con los medicamentos. En este estudio participarán los hospitales Perpetuo Socorro e Infanta Cristina, del Complejo Hospitalario Universitario de Badajoz, y el Hospital de Don Benito-Villanueva de la Serena.

El otro proyecto es una continuación y ampliación del estudio Eneas, en el que ya participó el Hospital Don Benito-Villanueva de la Serena. En su continuación sigue colaborando este centro y, además, se incorporan a él los centros de salud de Pueblonuevo del Guadiana y plaza de Argel, de las áreas de Salud de Badajoz y Cáceres, respectivamente.

El objetivo del estudio Eneas es la comunicación por parte de los profesionales de los centros sanitarios de los efectos adversos que se identifiquen en los pacientes que están siendo atendidos. Esta comunicación permite identificar las áreas que necesitan de un abordaje mayor para aumentar la seguridad del paciente y ayudan a crear un sistema de información sobre efectos adversos y las áreas de trabajo en las que hay que incidir.