Tras la tempestad, la región intenta recuperar la calma. Ayer no se registraron incidencias aunque aún está activada la alerta, grandes presas siguen aliviando agua y tres carreteras y varios badenes permanecen cortados. El nivel de los ríos continúa en descenso, pero el plan especial de inundaciones de Protección Civil continuará activo en su nivel de emergencia más bajo hasta el próximo domingo para realizar un seguimiento continuo de la evolución de los riesgos, principalmente en la zona de las Vegas del Guadiana, que ha sido la peor parada de este temporal.
La continuidad de la alerta significa que el personal de emergencias sigue vigilando de manera constante los niveles de caudal de la cuenca y su repercusión sobre las localidades más afectadas estos días. Según los datos del Gobierno regional, el descenso del caudal en las zonas de Barbaño, Talavera, Balboa y Rincón del Caya, principales focos de preocupación, es apreciable. También continúa en alerta, por si fuera necesaria su activación, el Puesto de Mando Avanzado instalado desde el pasado martes en el aeropuerto de Badajoz.
La vigilancia se mantiene mientras las grandes presas de las dos cuencas extremeñas siguen aliviando agua. La cuenca del Guadiana cerró ayer por la mañana las compuestas de los embalses de La Serena y el Zújar tras varios días vertiendo más de un millón de litros por segundo, mientras que los pantanos de Cíjara, García de Sola y Orellana seguían aliviando ayer 770 metros cúbicos por segundo al río Guadiana. La cuenca estaba ayer al 97% de capacidad.
En la cuenca del Tajo, la situación es de normalidad a pesar de que la mayoría de los embalses están abiertos para mantener los resguardos estacionales. En la mañana de ayer seguían desembalsando 29 embalses de la cuenca con un caudal de 4.115 metros cúbicos repartidos entre: Rosarito, Jerte, Gabriel y Galán, Valdeobispo, Rivera de Gata, Borbollón, Valdecañas, Torrejón Tiétar, Torrejón Tajo, Portaje, Alcántara (968 m3/s) y Cedillo 1.119 (m3/s).
En cuanto a la consecuencias, varias carreteras siguen afectadas: la Ex-106 entre Miajadas y Don Benito en el punto kilométrico 18,200 por hundimiento en la calzada; la Ex-
322 entre Cabeza del Buey y Puebla de Alcocer del punto. 27,400 al 30; y la BA-142 (del punto kilométrico 5 al 7) Valdetorres-Yelbes.
Asimismo, otras vías de menor relevancia permanecían ayer cerradas al tráfico. Son los badenes de Talavera la Real, Torremayor, Valdivia-Entrerrios y las pistas de Alcazaba-Canal de Montijo por destrozos e inundaciones; la carretera del Canal del Zújar y la EX-115 al mismo canal y la pista del cementerio de Puebla de la Calzada con la Ex-328, así como el Camino de Pedroche, desde el badén de Valverde de Mérida a Don Alvaro y el camino no asfaltado entre Castillo de la Encomienda-Guadiana del Caudillo.
El Gobierno regional está trabajando "de forma intensa" en la cuantificación de los daños ocasionados por las inundaciones y en "agilizar" los mecanismos que permitan que el fondo de contingencia de tres millones de euros "pueda fluir con la rapidez y la agilidad que necesiten los afectados". Así lo aseguró ayer la vicepresidenta, Cristina Teniente, quien rehusó hacer una valoración al respecto "hasta que no se cuantifiquen, se evalúen y determinen la magnitud de esos daños", pero lanzó un mensaje de tranquilidad.
