La entidad lusa responsable del proyecto de Tren de Alta Velocidad con España anuncia que el concurso del primer tramo de la conexión, que incluye 50 kilómetros y un puente sobre el Tajo, se prorroga un mes, hasta el 31 de agosto.

La decisión fue anunciada una semana después de que el Gobierno luso, presionado por la oposición y algunos sectores de la opinión pública, confirmara que las decisiones sobre el AVE, con un presupuesto total de unos 9.000 millones de euros, no se tomarán antes de las elecciones que deben ser convocadas para otoño.

La empresa estatal responsable del proyecto de alta velocidad, RAVE, precisó hoy que el plazo para entregar las propuestas del primer tramo, entre Lisboa y Poceirao, se ha ampliado un mes y el acto público de aceptación de ofertas será el 1 de septiembre.

Originalmente el concurso público había sido convocado el pasado 1 de abril con un plazo de 121 días para presentar las propuestas para la construcción de este tramo, cuyo costo se calcula en 1.928 millones de euros e incluye un nuevo puente sobre el río Tajo.

El miércoles de la semana pasada, el primer ministro luso, José Sócrates, garantizó en el Parlamento que el Gobierno que salga de las elecciones de este año en Portugal tendrá total libertad para decidir sobre el Tren de Alta Velocidad con España.

El dirigente socialista confirmó así las declaraciones de otros miembros de su Gobierno al responder a una pregunta del principal partido de la oposición, el Social Demócrata (PSD), de centro derecha, que ha pedido retrasar el proyecto ferroviario por considerarlo muy gravoso.

En ese entonces, el jefe del Ejecutivo argumentó que el tren de alta velocidad, que debe unir en 2013 Lisboa con Madrid y Vigo vía Oporto, resulta "fundamental" para la economía portuguesa.

Pero señaló que por "escrúpulos democráticos" el actual Gobierno socialista, que aspira a renovar su mayoría absoluta en las próximas elecciones, no firmará los contratos para la construcción de las infraestructuras del AVE.

El otro concurso para la ejecución del más largo tramo del AVE, de unos 150 kilómetros entre Poceirao y Caia, se encuentra ya en la fase final, con la participación en dos consorcios preseleccionados, de las empresas españolas Dragados, Iridium (ACS) y Sacyr Vallehermoso.

Esta licitación afecta a la nueva línea férrea que será tendida entre Poceirao, en las cercanías de Lisboa, y Caia, en la frontera lusa con Extremadura.