La Consejería de Sanidad y Consumo de la Junta de Extremadura tiene previsto que el sarampión desaparezca totalmente de la región en sólo dos años aprovechando la baja incidencia que ha presentado esta enfermedad en los últimos tiempos en la comunidad autónoma.
Para alcanzar este objetivo se está aplicando el Plan de acción para la eliminación del sarampión en Extremadura , que responde a las recomendaciones realizadas por la Organización Mundial de la Salud y a las líneas generales del Plan Nacional aprobado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Según han confirmado a EL PERIODICO EXTREMADURA fuentes de la Consejería, el plan regional contempla tres líneas estratégicas básicas: intensificar el sistema de vigilancia epidemiológica; reforzar el papel del laboratorio en la vigilancia; y las actividades de vacunación.
ACTIVIDAD SANITARIA
Dentro de estas consignas previas Sanidad decidió mantener las vacunas contra el sarampión a los 15 meses y a los 6 años (antes se hacía a los 11 años) y realizar una vacunación masiva a niños de entre 7 y 11 años, que se llevó cabo en el 2001 y alcanzó una cobertura del 94%. Con todo, desde la Consejería esperan que esta enfermedad desaparezca totalmente en un plazo de dos años.
Y es que pese a ser considerada por la ciudadanía como una dolencia normal, desde 1992 se trata de una enfermedad casi excepcional pero que en los países subdesarrollados causa unas 800.000 muertes anuales. Desde la entrada en vigor de este plan antisarampión cada vez que se detecta un caso sospechoso saltan todas las alarmas y se notifica de forma urgente antes de que pasen 24 horas, y posteriormente los laboratorios toman una muestra de sangre del sospechoso para confirmar si se trata de sarampión. De hecho, la aparición de un único caso sospechoso se considera brote epidémico.
En el 2001 hubo hasta 23 alertas de casos sospechosos, aunque finalmente sólo se confirmaron tres. El año pasado hubo doce casos notificados y de nuevo tres confirmados. En lo que va de 2003 se han notificado tres casos sospechosos, pero aún no se ha confirmado ninguno. Con estos datos, Sanidad espera que en el 2005 no haya en Extremadura población susceptible de padecer o transmitir la enfermedad.
