Fiebre y malestar general son los efectos secundarias más frecuentes que se están registrando entre algunos de los primeros vacunados frente al covid-19. Efectos que no los experimentan todas las personas, que apenas duran 24 o 48 horas y que «desaparecen por sí solos», señalan desde la Sociedad Española de Vacunología, pero que están siendo motivo de ausencias laborales entre el personal docente en las comunidades que ya han iniciado el proceso de vacunación entre los miembros de la comunidad educativa. Es el caso de Madrid, pero también se han registrado un goteo de algunas ausencias relacionadas en Andalucía o Euskadi.

En Extremadura, la vacunación a los trabajadores de la educación empezó este pasado lunes y ante la experiencia registrada en otras regiones, la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales ha decidido que «prioritariamente se va a vacunar los viernes», señalan a este diario desde la administración sanitaria.

De esta forma, si algún docente experimenta algún síntoma tendría el fin de semana para recuperarse. Se intenta así evitar que aumenten las ausencias en los centros educativos por los efectos secundarios de la primera inyección.

La inmunización del colectivo de docentes y no docentes que trabajan en el sistema educativo comenzó en Mérida, con la inyección de la primera dosis a 140 trabajadores menores de 55 años. Son un total de 16.000 empleados los que no superan esa edad y recibirán la vacuna de AstraZeneca. Los trabajadores mayores de 55 años serán inmunizados con Pfizer o Moderna cuando se termine de vacunar al grupo de extremeños que superan los 80 años y según la disponibilidad de las dosis de cada área de salud.