La Comisión de Fomento del Senado aprobó ayer una moción en la que reclama al Gobierno central que mantenga y respete todos los términos del acuerdo que sobre el AVE Madrid-Lisboa alcanzaron España y Portugal en la cumbre de Figueira da Foz. Así, con los votos a favor del PP y el rechazo del PSOE, salió adelante esta propuesta, que apuesta porque se asuman tanto el trazado como los plazos y las condiciones técnicas de este corredor ferroviario que se marcaron en la cumbre hispanolusa del 2003.

El senador popular José Manuel García Ballestero aseguró que no entiende "que algo que estaba aceptado por todos ahora se cambie", al tiempo que apuntó que tiene "la sensación de que el tren de alta velocidad de Extremadura va perdiendo cada vez más velocidad". Desde el PSOE, Carmen González Lahidalga explicó que "no va a ser posible definir en tiempo y forma un trazado definitivo y tajante hasta que no esté resuelta la vía". Aún así, insistió en que el proyecto del AVE extremeño "no sólo no se ha paralizado, sino que se ha mejorado".

Por su parte, el presidente del PP extremeño, Carlos Floriano, calificó como "muy grave" la actitud del PSOE. A su juicio, "los socialistas han demostrado que les interesa más defender a su partido que el interés de los ciudadanos" y recordó que uno de los senadores que ha votado en contra ha sido el extremeño Eduardo de Orduña.

Por otra parte, a preguntas de los periodistas sobre la preocupación mostrada por el Gobierno de Portugal en torno al proyecto extremeño del AVE, el consejero de Infraestructuras, Luis Millán Vázquez de Miguel, manifestó que el acuerdo de la Junta con Fomento "está claro", y se mostró "esperanzado" en que los dos países lleguen a acuerdos "satisfactorios".

Mientras, CCOO exigió al Ministerio de Fomento que el proyecto de tren de alta velocidad al que se comprometió el pasado 20 de enero, porque es mucho más beneficioso para la región que el acuerdo de Figueira.