Casi el 75% de los trabajadores del Servicio Extremeño de Salud (SES) que quieren trabajar más allá de su edad de jubilación (65 años y seis meses actualmente) no pueden hacerlo. La Consejería de Sanidad ha denegado 146 solicitudes de prolongación del servicio activo de las 196 presentadas en los dos años que lleva en vigor el último plan de recursos humanos del SES. Las 50 restantes se han concecido por razones de necesidades asistenciales del sistema y en principio hasta los 67 años -aunque en casos excepcionales podría autorizarse hasta los 70-.

Con estos datos y tras dos años ya en vigor, la limitación de edad actual para el ejercicio en la sanidad pública se ampliará. Ya lo avisó el propio consejero de Sanidad cuando se reformó el plan: «Dos años es un periodo de tiempo suficiente para que la Administración pueda generar los mecanismos necesarios que le permitan afrontar la cobertura de plazas».

Ahora, cumplido ese tiempo y tumbados los recursos judiciales interpuestos por dos sindicatos (CSIF y Simex) en contra de la obligación de jubilarse a los 65, el SES quiere sentarse con los sindicatos para hacer cambios y ampliar la edad de jubilación de forma generalizada y voluntaria hasta los 67 años (será la legal en el 2027). «Me parece que es una buena edad porque permite el equilibrio entre la incorporación de los nuevos y la jubilación de aquellas personas que ya han dedicado mucho tiempo a lo mejor que tenían ellos mismos, que es atender a las personas y a los pacientes», aseguró ayer José María Vergeles. Hasta el momento, dijo, se ha estado haciendo «excepciones» cuando el especialista que se iba a jubilar «no tenía detrás una bolsa de recambio» y siempre que él lo solicitara. Pero en caso de existir bolsa de la especialidad, el profesional se jubilaba a los 65 años. Con el cambio, el SES quiere que el servicio se pueda prolongar «independientemente de la existencia o no de bolsa».

RECURSO / Desde CSIF valoran la disposición del SES a sentarse a hablar sobre este asunto pero señalan que recurrirán ante el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura la sentencia emitida por un juzgado de Mérida. «Seguimos pensando que la jubilación forzosa a los 65 años se está utilizando para amortizar plazas y nos oponemos, no queremos que continúe mermando las plantillas y, por eso, vamos a recurrir», explica Emilia Montero.

En este sentido, desde los colegios de médicos de la región urgen diálogo para evitar alargar más este proceso y piden al SES que permita prorrogar el servicio activo a todos los que lo soliciten. «Existen dificultades para cubrir plazas, por eso consideramos necesario prolongar la edad de jubilación de forma voluntaria hasta los 67 o los 70 años, siempre que se reúnan las facultades necesarias de su puesto».