La Dirección General de Tráfico (DGT) desarrolla desde ayer y hasta el próximo viernes una nueva campaña especial dedicada al control del transporte escolar, que se llevará a cabo sobre todo en las carreteras convencionales y en las vías urbanas.

Así, según informó la Delegación del Gobierno, durante estos cinco días se van a realizar inspecciones tanto sobre los vehículos, sus condiciones técnicas y su documentación; como sobre los conductores en relación a los permisos, tiempos de conducción y descansos. Para ello, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil contará con unos 400 agentes y la colaboración de las comandancias de Seguridad Ciudadana de Badajoz y Cáceres, así como del los ayuntamientos de la región.

La última campaña de este tipo en las carreteras extremeñas, realizada entre el 27 de noviembre y el 1 de diciembre de 2017, conllevó un total de 181 vehículos controlados (73 en la provincia de Badajoz y 108 en la de Cáceres), de los que fueron denunciados 116 (60 en Badajoz y 56 en Cáceres) para un total de denuncias de 218 (110 y 108, respectivamente).

La mayoría de las infracciones se produjeron por no contar el autobús con la autorización especial para transporte escolar (114). Desde el curso 2007-2008 todos los vehículos dedicados al transporte escolar deben cumplir los requisitos que se recogen en el Real Decreto 443/2001 de 27 de abril sobre las condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores.

Esta norma establece diversos requisitos como la obligatoriedad de que los menores vayan acompañados en el autobús por una persona debidamente cualificada, la antigüedad máxima de los vehículos, el seguro de responsabilidad civil ilimitado o la obligatoriedad de llevar señal de transporte escolar, entre otros, de singular importancia.