La Consejería de Sanidad y Consumo y la Universidad de Extremadura (Uex) llevarán a cabo un estudio que analizará y planteará acciones de mejora en la eficiencia y la calidad en la gestión del Sistema Sanitario Público de Extremadura (SES).

En el proyecto van a participar expertos en gestión del propio SES y profesores de la facultad de Económicas de la universidad extremeña, que se ocuparán de realizar un análisis global --no sólo economicista-- del sistema sanitario público extremeño, detectando aquellas herramientas que pueden permitir una gestión más eficiente y de mayor calidad del Servicio Extremeño se Salud. Esto pasa por establecer directrices que permitan un uso adecuado de los recursos, tanto en cuanto a la efectividad de las medidas, como a su viabilidad económica, sin descuidar la seguridad de los procedimientos.

En este sentido, el director general de Formación, Inspección y Calidad Sanitaria, José María Vergeles, afirma que en la actualidad ya se está llevando a cabo una gestión "adecuada" del Sistema Sanitario Público en Extremadura, como lo reflejan todos los estudios independientes", pero añade, "esto lejos de situarnos en una posición triunfalista, requiere que trabajemos incansablemente en una mejora continua de nuestras actuaciones en la planificación de política sanitaria y en la gestión sanitaria". Vergeles cree que el estudio puede ser una "referencia" importante para el Sistema Nacional de Salud.

En realidad la iniciativa responde, en parte, a la propuesta que la ministra de Sanidad, Elena Salgado, presentó el lunes instando a las comunidades autónomas a emprender acciones de mejora de la atención primaria.

PROPUESTA DE SALGADO Se trata de un plan de mejora denominado Atención primaria del Siglo XXI: estrategias de mejora que comprende 44 pautas en las que el ministerio propone acciones de mejora orientadas "al ciudadano" a "la efectividad", a "la gestión" y al desarrollo profesional de los facultativos.

El texto elaborado por del equipo de Elena Salgado persigue reducir la burocracia y ampliar el uso que se hace en la actualidad de las tecnologías, a fin de mejorar la calidad de la medicina de familia, disminuyendo el número de consultas por médico y favoreciendo una mayor dedicación al paciente.

Actualmente la situación de la atención primaria en la región destaca como una de las mejores del país, al menos en cuanto al número de facultativos por habitante. Así, Extremadura ocupa la cuarta posición del ranking nacional con 79,1 médicos por cada cien mil habitantes, y sólo la superan Aragón, La Rioja y Castilla y León, que encabeza la lista.

Entre las medidas concretas que propone el ministerio figura la de ampliar las competencias del médico de familia, permitiéndole resolver las patologías más frecuentes solicitando él mismo las pruebas diagnósticas o gestionar el tamaños de los grupos de pacientes por facultativo de modo que estos puedan dedicarles más tiempo.

Para alcanzar este fin también se incluyen medidas novedosas como la receta multiprescripción , o lo que es lo mismo la prescripción en una receta única de todos los fármacos que el paciente deba administrarse durante el tiempo estimado por el facultativo. Además apelan a que las regiones potencien la atención farmacéutica, para que sean ellos quienes se ocupen de atender las terapias de los enfermos crónicos y reducir también así la saturación de las consultas.

Otro cupo de medidas pasa por informatizar las consultas médicas, introduciendo la tele-cita , la receta electrónica o la historia clínica informatizada.