A Urbano García (Plasencia, 1965) le gustan los retos y más si son en Extremadura, «porque soy una persona muy apegada a mi tierra». Tras más de 30 años dedicado al periodismo, pasa de dirigir la delegación territorial de RTVE a coger las riendas de la Corporación Extremeña de Medios Audiovisuales (Cexma), un ente que supera los 24 millones de presupuesto anual y cuenta con más de 200 trabajadores. Su objetivo es convertir los medios extremeños en motivo de orgullo para sus paisanos y adecuarlos a los continuos cambios en su consumo.

-¿Esperaba el respaldo mayoritario de la Asamblea (54 votos a favor y 5 en contra) en su elección?

-No era una cuestión de expectativa personal, sino de que el proyecto recibiera el respaldo de los grupos, entendiendo que estos medios públicos (radio, televisión y medios digitales) son fundamentalmente de los ciudadanos, no son de los políticos, ni de los trabajadores de la casa, ni de las productoras.

-¿Cuál es su proyecto? ¿Qué objetivos se marca para esta etapa?

-Dada la situación de arranque es posible que la totalidad del proyecto tarde un poco en desarrollarse, pero lo que buscamos es que los medios públicos sean para los extremeños algo propio, que los identifiquen como suyos; y además conseguir esa adaptación, ese cambio de rumbo que sirva para que podamos adaptarnos a que a la par que han cambiado las formas de consumo de la gente, cambien los productos que les ofrecemos, nuestros propios roles y eso en el fondo es un cambio no solo de una cultura corporativa sino de cómo se deben entender los medios públicos en la región.

-¿Por qué dice que el espectadora tardará en ver su sello?

-Sobre todo en televisión hay que trabajar con previsión y una parte de los contenidos del año que viene están bastante comprometidos. Los presupuestos de 2018 están casi cerrados y el planteamiento que yo hago, convertir una empresa tradicional de radio y televisión en una plataforma multimedia que genere contenidos audiovisuales para todo tipo de soportes y de formatos, no se hace de la noche a la mañana.

-¿Qué radiografía hace de la Cexma tras más de 10 años en marcha?

-Quizás todos los medios en general seguimos teniendo como asignatura pendiente: reengancharnos con la audiencia porque creo que hay una cierta desafección. También hay un cuestionamiento permanente de los medios públicos y cada día tenemos que justificar nuestra consideración como servicio público, cada día tenemos que hacernos imprescindibles para la vida de los ciudadanos. Después de diez años creo que todo el mundo se ha dado cuenta que incluso en una región como esta, hacer televisión, radio y medios digitales de calidad requiere mucho dinero.

-Es público que en 2015 había una deuda de ocho millones ¿Cúal es la situación económica?

-Estoy en estos días poniéndome al tanto de los números pero no quiero entrar en lo que se ha hecho antes, me gusta más construir sobre lo nuevo. La situación económica es delicada, pero hay que ajustarse a los recursos que tenemos. Hay que seguir pagando deudas, pero no puedo perder mucho tiempo en quejarme de lo que haya pasado hasta ahora, eso ni nos beneficia ni nos lleva a ningún futuro.

-¿Qué percepción cree que tiene la sociedad de Canal Extremadura?

-En un momento en el que los medios públicos son muy cuestionado, no solo por su papel sino también por las subvenciones que reciben por parte de las instituciones, nuestro gran objetivo es hacernos imprescindibles en la vida de los extremeños, de tal manera que entiendan que esto es un servicio público de ellos, por ellos y para ellos. No le veo otro sentido a nuestro trabajo.

-¿Cómo se consigue eso?

-Antes nos podíamos permitir el lujo de que el público viniera a la hora que le citábamos pero ahora es el público el que nos reclama la información a la hora que él quiere, dónde quiere y en el soporte y formato que quiere y eso nos obliga a hacer un esfuerzo de superviviencia: o nos amoldamos y buscamos a toda esa gente donde está o este tipo de planteamientos caminan hacia su desaparición.

-Entre esos cuestionamientos hay acusaciones de endogamia, de intereses políticos... ¿Se puede ser independiente?

-Ese sentimiento tiene que partir del propio gobierno, creo que cuanta más independencia haya siempre vamos a tener mejor servicio público. El encargo que yo he recibido es el de actuar con absoluta libertad para intentar que eso se pueda producir. Creo que a la larga, todos los partidos, en el gobierno o en la oposición, deben tener la sensación de que ese funcionamiento en libertad a ellos les da prestigio y habitualmente en muchos entes autonómicos lo que ha habido es una utilización partidista de los medios que al final se ha vuelto contra quien la ha utilizado.

-¿Qué importancia tendrán las productoras extremeñas en esta etapa? ¿Se deben priorizar?

-Soy contrario a las cuotas por decreto, nuestra prioridad van a ser siempre las productoras extremeñas, pero creo que también deben atenerse a unas reglas de mercado y no por el hecho de ser extremeña tener una parte del pastel, sino que hay que hacerlo con una cierta calidad y unas características que permitan igualar cuanto menos la calidad que pueda presentarse de otros proyectos. Pero desde ya y desde cero nuestra preferencia van a ser las productoras de aquí.

-Canal Extremadura es la quinta cadena de televisión más vista en la región (5,7% de cuota) y su público principal supera los 45 años.

-A día de hoy los niños están en Snapchat, los jóvenes en Youtube e Instagram, los adultos en Twitter y Facebook y los mayores en WhatsApp. Nuestro objetivo es no reducirnos a un fragmento de audiencia, que sea mayor de equis años y rural y además también hay que romper las barreras y no hablar solo de televisión, creo que son importantes todos los medios, incluso hay que invertir las prioridades y a día de hoy hay que ser sociales antes que televisivos y radiofónicos. Tampoco me preocupa excesivamente la cuota de pantalla, creo que el sistema de medición en España está absolutamente desfasado y que el número de audímetros que hay en Extremadura no es lo suficientemente significativo. Creo que hay que buscar una rentabilidad social por encima de la aritmética.

-¿Se puede llegar a entender que una región como Extremadura tenga dos medios públicos?¿Sería posible una integración con RTVE?

-Es otro debate sobre la mesa. Entiendo que el nacimiento de las televisiones autonómicas en comunidades con determinadas características lingüísticas o históricas tuvo y tiene mucho sentido y luego hay una serie de comunidades para las cuales se ha planteado desde diversos grupos de trabajo la colaboración entre entes autonómicos y radiotelevisión española especialmente en ese tipo de regiones que son pequeñas y tienen algún tipo de déficit en cuestiones sociales. Es un camino que hay que continuar.

-A la hora de dirigir este ente, ¿es una ventaja ser extremeño y haber desarrollado su carrera aquí?

-Sí, de hecho mucha de la gente con la que me reencuentro han estado de becarios conmigo en otra empresa. Lo que ocurre es que lo que hayamos sido hasta ahora ya no importa. La tecnología ha empoderado a los ciudadanos y con un móvil en la mano son un medio de comunicación en potencia cada uno. Ahí ni nuestro nombre ni lo que hayamos sido hasta ahora vale de mucho. Estamos todos en la misma línea de salida y eso hace que debamos variar nuestro planteamiento.