De aquí a final de año". Fue el plazo que el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, fijó como el que "le gustaría" para que las cajas extremeñas --Caja Extremadura y Caja Badajoz-- definan los "posibles escenarios" de colaboración entre ellas y, a partir de ahí, tomen una decisión. Tras recordar que se trata de una competencia de los respectivos consejos de administración de las propias entidades, el jefe del Ejecutivo regional reiteró su postura favorable al reforzamiento del sector financiero en Extremadura --para lo que impulsó el pacto firmado en la Asamblea en este sentido--, pero señalando que ahora hay "una gama de fusiones" --colaboración, cooperación...--.

Así lo manifestó Vara durante su intervención en el primero de los Desayunos Informativos Extremadura de Europa Press , celebrado ayer en Mérida, en el que además de reiterar su apuesta por el acercamiento entre las cajas extremeñas e incluso de estas con otras de fuera de la región --"hay nuevas opciones de poder hacerte más grande no solo aquí, sino también con otras"--, se mostró tajantemente en contra de una hipotética entrada de la banca en las cajas de ahorro. En este sentido, recordó que estas últimas entidades velan por el interés general, mientras que los bancos, "legítimamente", lo hacen por el de sus accionistas.

En este punto, el presidente extremeño reconoció su disconformidad con la operación de Caja Astur sobre Caja Castilla La Mancha, por llevarse a cabo a través de un banco (en alusión al Banco Liberta). Tras mostrarse partidario de la colaboración con las cajas en cuestiones estratégicas para la sociedad --como la de Caja Astur en la puesta en marcha de la fibra óptica en Extremadura--, consideró que la entrada de la banca genera "indefinición" en este tipo de relaciones.

DEBATE SOBRE FUSIONES Pero no es este el único vínculo con la actualidad del discurso de Vara, que abordó la posible fusión de las cajas en un momento en que este tema está en la primera línea de interés. Hay que recordar que lo hizo al día siguiente de que el gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, afirmara en una entrevista que un tercio de las 45 cajas de ahorros que hay en España deberían fusionarse antes de la próxima primavera.

En este escenario, el presidente de la Junta señaló que su apuesta por el acercamiento entre las cajas extremeñas, refrendado por la Asamblea, no responde a un problema de solvencia o rentabilidad --recordando que, de hecho, las entidades regionales están entre más rentables y solventes en términos relativos--, sino de ampliar el "músculo financiero" de Extremadura para aumentar "las posibilidades de participar en proyectos clave para esta región". Es por eso que solicitó a los responsables de los consejos de administración de Caja Extremadura y Caja Badajoz que tengan en cuenta la petición del parlamento y representen, "de aquí a final de año", los "escenarios posibles" para que, a partir de ahí, tomen una decisión.

En cuanto al debate sobre si la presencia de políticos en los órganos de administración de las cajas de ahorros, Vara se preguntó quién ocuparía su lugar si estos no estuvieran --¿si los políticos salen, quién entra, alguien no representativo?". Al respecto, aseguró que "si es para que entre la banca", no está en absoluto de acuerdo con que se produzca esa salida y hará todo lo posible, desde Extremadura, para trabajar en ese sentido.