"Es la gran asignatura pendiente". Así se refería ayer Joan Roca a la entrada de la gastronomía en disciplinas universitarias, como la cultura, el turismo, la geografía y la agricultura. Fue una de las peticiones de ayer en la reunión de los mejores 140 chefs españoles en la Fundación Alícia de Sant Benet de Bages (Barcelona). Para Roca, el anfitrión, se trata de que no solo los cocineros sean licenciados, "sino que la cocina entre en todas las licenciaturas". Algo parecido a lo que ocurrirá el próximo curso en la Universidad de Harvard, donde chefs españoles darán clase.

Roca fue, junto a Ferran Adrià, Pedro Subijana y Juan Mari Arzak uno de los chefs más reconocidos que participaron en el encuentro de los Euro-Toques. Se trata de una organización con presencia en más de 18 países de Europa que tiene por objetivo debatir los retos del sector gastronómico en cada Estado. La delegación española cuenta con 800 cocineros.

En el encuentro de ayer, cuyo escenario fue uno de los principales centros de investigación culinaria del mundo, los cocineros mostraron su satisfacción por la construcción en marcha en San Sebastián del Basque Culinary Center, la primera facultad de ciencias gastronómicas del Estado. "Hasta ahora, desde el mundo universitario se habían impartido cursos, créditos y otras cosas anecdóticas. Pero nunca ha existido la voluntad de hacer estudios con la transversalidad suficiente para tocar distintos temas universitarios, enfocados desde la óptica gastronómica", señaló Roca.

Los chefs presentaron ayer el sello de promoción gastronómica Saborea España , que tiene por objetivo poner en marcha un Club del Producto que mejore las posibilidades del turismo gastronómico. A los siete enclaves piloto iniciales (Santiago, San Sebastián, Lleida, Valladolid, Gijón, Cambrils y Lanzarote) se han incorporado recientemente Valencia, Ciudad Real, Albacete y Zaragoza.