Poco a poco, Mallorca empieza a cobrar la normalidad tras el trágico atentado del pasado jueves. La isla se prepara para la celebración de la 28 edición de la Copa del Rey de Vela, la regata internacional más importante del mar Mediterráneo, que se inicia esta misma mañana con un minuto de silencio por los dos guardia civiles asesinados en Calvià por ETA.

Los barcos calientan motores y las tripulaciones han empezado ya los entrenamientos, entre ellas la del CAM , el elegante velero que patronea el príncipe de Asturias. Felipe llegó ayer al Club Náutico a media mañana y se dirigió a esta embarcación, Farr 54, de los campeones olímpicos Kiko Sánchez Luna y Fernando León. La CAM es la favorita de la categoría IRC, la clase más disputada de la prueba. El Bribón , que pertenece a la categoría de los Transpac 52 y que, en algunas fases, tendrá como patrón al rey Juan Carlos empezará hoy sus entrenamientos.

INICIO DE LA REGATA Letizia y las infantas Leonor y Sofía, que se encuentran junto al Príncipe desde el viernes en el Palacio de Marivent, no estuvieron ayer al alcance de los objetivos de los fotógrafos apostados en las inmediaciones del Club Náutico, pero sí se espera su presencia hoy en el muelle coincidiendo con el inicio de la importante regata. Quien no estará en la isla es la Reina que, acompañada por sus hijas, las infantas Elena y Cristina, abandonó Mallorca ayer con destino a Atenas para asistir al bautizo del quinto hijo de su sobrino Pablo de Grecia, hijo de su hermano Constantino. Sofía tiene previsto pasar algunos días en su país natal antes de regresar a Marivent.