Los alumnos de la escuela Sandy Hook en Newtown que sobrevivieron a la matanza del pasado 14 de diciembre, volvieron este jueves a clase aunque lo han hecho en la escuela de Chalk Hill en la localidad vecina de Monroe, donde retomarán sus estudios. Los 500 alumnos asistieron a clase casi en su totalidad y los padres esperan que vuelvan a la rutina para recuperar la normalidad.

El centro, que ha adoptado el nombre de la escuela donde se produjo la masacre, ha sido rehabilitado para acoger a los menores: trabajadores y voluntarios han reproducido en lo posible las condiciones de la antigua escuela, como el color de la pintura y el mobiliario, que estaba intacto. Las pertenencias que los alumnos dejaron el dia de la matanza también han sido devueltas.

El colegio ahora cuenta con más dispositivos de seguridad, desde cámaras de vigilancia hasta presencia policial, aunque el teniente de la policía responsable afirma que su intención es que "los niños vengan a aprender, divertirse y crecer" y no que vean el lugar como "un estado policial".

El pasado mes de diciembre, la escuela Sandy Hook fue sorprendida por el joven Adam Lanza quien disparó indiscriminadamente dejando muertos a 20 niños y 6 adultos.