Mientras los países pobres afrontan una crisis de imprevisibles consecuencias a causa de la subida del precio de los alimentos, los países miembros de la Unión Europea están reduciendo sus ayudas al desarrollo, en contra de sus promesas. La Comisión Europea instó ayer los Veintisiete a realizar un mayor esfuerzo ante el "tsunami humanitario" que se avecina en el continente africano.