El jefe de la Administración prorrusa de Chechenia, Ajmad Kadirov, se convirtió ayer, de hecho, en el nuevo presidente de esta república caucásica, al obtener una aplastante mayoría de los votos en las elecciones del domingo. Con el 77% de votos escrutados, el candidato apoyado por el Kremlin obtuvo el 81,1% de los sufragios, según la Comisión Electoral de Chechenia. Los seis rivales de Kadirov sumaron el 12,6% de sufragios.

Nada más hacerse públicos los resultados preliminares, Kadirov explicó cuáles serán sus primeros pasos como presidente. Prometió llevar a cabo una investigación de lo que calificó de "golpe de Estado", la sublevación armada que en 1991 disolvió el Parlamento checheno para iniciar la separación de la Federación Rusa. También prometió acabar con su rival y líder de la guerrilla, Aslan Masjadov e investigar todos los casos de desaparecidos.