La República Democrática del Congo (RDC) celebra hoy, entre el escepticismo y la esperanza, sus primeras elecciones multipartidistas en 40 años. Tras décadas de abusos coloniales, matanzas interétnicas, dictaduras y dos guerras civiles que costaron cuatro millones de muertos, puede decirse que la continuada violación de los derechos humanos y el hambre han sido las únicas constantes en la vida de los congoleños.

En el censo electoral figuran 25.696.964 personas, convocadas para elegir presidente por sufragio universal entre 33 candidatos y a los 500 diputados que compondrán la Cámara baja del Parlamento. Entre los candidatos figuran el actual jefe de Estado, Joseph Kabila, el favorito según los sondeos, y dos antiguos líderes rebeldes convertidos en vicepresidentes tras el acuerdo de paz del 2002.