El Gobierno saliente de Aznar no ve motivos para pedir a los ciudadanos españoles que abandonen Irak. Un portavoz del Ministerio de Exteriores justificó ayer esa posición en que la colonia española en el país árabe "es muy pequeña" y la integran personas que, ya sea por razones de trabajo o familiares, tienen voluntad de permanecer en el país.

La ministra de Exteriores, Ana Palacio, dijo, en una entrevista en Tele 5, que la realidad iraquí es "mucho más compleja" de la que refleja la prensa y que no tiene "en absoluto" los "tintes negros" que muestran los medios.