El exprimer ministro ruso y padre de las reformas liberales, Yegor Gaidar, ha estado entre la vida y la muerte a causa de una severa intoxicación que pudo ser intencionada. Esta fue ayer la versión del antiguo número dos del Ejecutivo liberal ruso de los 90, Anatoli Chubais, quien vinculó la enfermedad de Gaidar al reciente asesinato en Moscú de Anna Politkóvskaya, periodista crítica con el Kremlin, y a la muerte en Londres del exagente del KGB Alexander Litvinenko.

"El 24 de noviembre Gaidar estuvo al borde de la muerte. ¿Pudo haber ocurrido por una enfermedad natural? A juzgar por lo que dicen los mejores médicos que conocen la situación de primera mano, la respuesta es no ", dijo Chubais, presidente de Sistemas Energéticos Unidos (SEU) --el monopolio eléctrico de Rusia--.

Chubais afirmó que la intoxicación de Gaidar pudo haber sido parte de un complot contra el Kremlin. Gaidar, de 50 años, cayó enfermo el pasado viernes, cuando participaba en una conferencia en Dublín. Fue trasladado a una unidad de cuidados intensivos de un hospital de la capital irlandesa. El ingreso de Gaidar se produjo al día siguiente de la muerte del exespía ruso Litvinenko, en cuyo cuerpo hallaron Polonio 210, un isótopo radiactivo venenoso.

El estado de Gaidar, director del Instituto de Economía de Periodos de Transición, ha mejorado desde que fue hospitalizado el pasado lunes en una clínica moscovita.