Hoy Austria decide si la ultraderecha obtiene por primera vez en su historia la presidencia del país pero esta mañana el país transalpino se ha despertado impactado por otra noticia. En Nenzing, al oeste, un hombre ha abierto fuego en medio de un concierto al aire libre matando a dos personas e hiriendo a otras 11. Después del ataque el autor se ha suicidado.

El hombre, de 27 años, discutió fuertemente con una mujer durante la madrugada de este domingo mientras estaban en una fiesta en un club de motos. Después de la discusión, el hombre salió del local hacia su coche, ahí agarró un arma y regresó para disparar entre la multitud, donde había unas 150 personas.

Según las primeras investigaciones y lo que apunta la prensa local, el ataque ocurrió a las 3.00 horas de la madrugada y tras los disparos los asistentes a la fiesta huyeron corriendo hacia el bosque. Los 11 heridos han sido trasladados a los hospitales de Voralbergdel, la provincia en la que se sitúa Nenzing, mientras la policía sigue investigando lo sucedido.

Aunque las causas aún no están claras y no se ha descartado ninguna línea en la investigación todo apunta a que no se trata de un ataque terrorista. La posible vinculación, real o no, del caso con elterrorismo islamista podría beneficiar al xenófobo y euroescéptico Partido por la Libertad (FPÖ), que hoy parte como favorito en las elecciones con un discurso de tensión y miedo.