LA POBLACION palestina crece a un ritmo muy superior a la judía y en menos de 20 años ambas comunidades podrían equipararse en número, según una encuesta. El alcalde de Jerusalén, el ultraortodoxo Uri Lupoliansky, hizo ayer sonar las alarmas apelando al miedo. "Jerusalén podría dejar de estar bajo soberanía judía, para pasar a estar regida por Hamás", dijo.