"Para un asesinato selectivo necesitas información .... Aquí se ha hecho lo opuesto: primero lo matas y luego investigas". Según las nuevas revelaciones conocidas ayer de un alto mando y un oficial destinado en una de las salas de coordinación de la ofensiva de Gaza del pasado invierno, Israel modificó sus reglas de combate referentes a la protección de los civiles para evitar un número de bajas como las que sufrió en la guerra del Líbano del 2006. "Literalmente, riesgo cero para los soldados", fue la consigna.

Una de las reglas a las que se hizo caso omiso fue el principio militar conocido como "medios e intenciones", según el cual antes de disparar a un sospechoso hay que asegurarse de que lleva un arma y pretende utilizarla. "Esta es una definición válida para operaciones de arresto en Cisjordania. Aquí no estábamos ante una operación regular de antiterrorismo. Hay una clara diferencia", dijo el alto mando al diario israelí Yedioth Ahronot. Sus palabras, sin embargo, han sido publicadas por el británico The Independent, después de que Yedioth las tuviera archivadas durante cinco meses.

"En esta operación se puso todo patas arriba", dice el oficial destinado en la war room. Y añade que "los cuarteles dispararon mucho más que los soldados" y que, para evitar emboscadas de Hamás, "se arrasaron áreas enteras".