Al menos siete personas fallecidas y más de 600 heridas es el balance de los enfrentamientos protagonizados entre detractores y partidarios del presidente de Egipto, el islamista Mohamed Mursi, en el marco de las masivas protestas del domingo para reclamar la dimisión del dirigente.

Según han informado fuentes médicas y de la policía, cinco de los fallecidos murieron a consecuencia de disparos en las localidades de Beni Suef, Fayoum y Assiut, en el sur de El Cairo. Los otros dos han muerto, también por disparos, en el asalto a una sede de los Hermanos Musulmanes --el partido de Mursi-- en un barrio de la capital. Cientos de personas atacaron las oficinas del partido con piedras y cócteles molotov que incendiaron el local mientras guardias de seguridad y dirigentes del partido respondían con disparos desde dentro del edificio. Al menos once personas fueron atendidas con heridas de bala, según cifras de la agencia oficial de noticias MENA.

En el conjunto del país, la cifra de heridos en las protestas se eleva a 613, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad.

Estos incidentes son el colofón de una intensa jornada de manifestaciones. Decenas de miles de personas se congregaron este domingo en la plaza de Tahrir de El Cairo para pedir la renuncia de Mursi. Estas protestas se reprodujeron en otras zonas de la capital y del país. El ejército estimó en "varios millones" el número de manifestantes anti-Morsi.

Armas incautadas

Algunas de las marchas, que oficialmente empezaron a las 16.00 hora local (15.00 horas en España), llegaron a la céntrica plaza cairota, donde los manifestantes ondearon banderas egipcias y portaron pancartas en las que estaba escrita la palabra "Erhal" (Vete), en alusión al presidente islamista. Familias enteras acudieron al lugar, donde destacaba la presencia de mujeres, mientras que en las calles adyacentes apenas había tráfico y los comercios permanecían cerrados, como si fuera un día festivo.

La policía egipcia detuvo a 17 hombres armados cuando se dirigían hacia la manifestación a favor del presidente egipcio, Mohamed Mursi, en El Cairo, informaron fuentes de seguridad, que añadieron que se han interceptado grandes cantidades de armas dirigidas hacia esa protesta.

Rechazo de "imposiciones"

En una rueda de prensa, el portavoz de la Presidencia egipcia ha insistido en que Mursi no acepta "imposiciones" pero ha asegurado que el presidente no infravalora las demandas de los manifestantes.

"El presidente nunca ha pensado que las demandas del pueblo estén equivocadas, las escucha y las atiende todas", ha señalado el portavoz, que ha explicado que el mandatario se ha reunido con ministros de su Gabinete para analizar las protestas.