A pocos meses de las elecciones presidenciales francesas, la revelación del diario Le Figaro sobre la irrupción de unos desconocidos en el domicilio de la socialista Ségol¨ne Royal ha provocado una viva polémica. La favorita de los sondeos para la investidura de la candidatura del Partido Socialista (PS) francés acusó al ministro de Interior, Nicolas Sarkozy, y probable rival en los próximos comicios, de provocar la filtración de la noticia.

CASA REVUELTA Según Le Figaro , Royal y su compañero y primer secretario del PS, Fran§ois Hollande, denunciaron el robo al volver de vacaciones y encontrarse la casa revuelta, armarios y cajones abiertos.

El diario indicaba que los visitantes se "habían llevado algunas joyas" y citaba fuentes policiales y del Ministerio de Interior. También precisaba que el apartamento, en las afueras de París, no estaba vigilado y que el gabinete del ministro de Interior "seguía de cerca el caso, considerado sensible".

A la vista del artículo, Royal, furiosa, llamó a la agencia France Presse para precisar que los intrusos "no habían robado nada" sino que solo habían registrado a fondo el piso.

La posible candidata socialista a las elecciones presidenciales francesas se declaró "escandalizada" por lo ocurrido en su casa y por la filtración de la noticia, aunque aseguró que no se siente "en absoluto intimidada". Pero, por si acaso, reconoció que ha hecho "verificar la seguridad de sus líneas telefónicas".

INTERIOR DESMIENTE El Ministerio francés de Interior hizo público un comunicado desmintiendo haber divulgado "ninguna información de carácter confidencial referente a una eventual entrada en ese domicilio". Tras el comunicado, Royal "tomó nota del desmentido", aunque insistió en que de alguna manera el ministerio ha contactado con la prensa "para informar o para confirmar".