La condena general a la intención de Israel de eliminar al presidente palestino, Yasir Arafat, resonó ayer en el Consejo de Seguridad de la ONU, durante el debate abierto a todos los países miembros de la organización sobre la situación en Oriente Próximo. No obstante, el embajador israelí ante el organismo, Dan Gillerman, se mantuvo en sus trece: "Arafat es un obstáculo para la paz y debe ser eliminado".

Gillerman acusó al Consejo de "hipocresía" por avenirse a considerar una resolución presentada por los palestinos exigiendo que Israel desista de exiliar o actuar contra Arafat. EEUU y la Unión Europea reiteraron que el cumplimiento de la Hoja de ruta es la mejor fórmula disponible para tratar de pacificar la región.

CITA EN PARIS

En París, el presidente francés, Jacques Chirac, y su homólogo egipcio, Hosni Mubarak, calificaron los planes de Israel de eliminar a Arafat de "error extremadamente peligroso". "El exilio o el asesinato de Arafat no resolverá nada", subrayó Mubarak, que coincidió con Chirac en apuntar que el "alejamiento" del rais no es un gesto "en interés de la paz".