Un libio sospechoso del asesinato de una policía británica a las puertas de la embajada de ese país en Londres en 1984 ha sido detenido por los rebeldes libios en Bengasi. Se trata de Omar Ahmed Sodani, al que se sospecha culpable de la muerte por bala de la agente Yvonne Fletcher, de 25 años. En declaraciones a la cadena de TV Channel 4 desde el lugar donde permanece detenido en esa ciudad libia en poder de los rebeldes, Sodani reconoció que trabajaba entonces para la embajada libia, pero negó ser el autor de los disparos. "No estaba en aquel lugar cuando ocurrieron los hechos. Me había enfrentado antes a un agente. Me detuvieron y cuando estaba en la comisaría, me enteré de que se había producido un tiroteo y había muerto una policía", afirmó. La agente estaba ayudando a controlar una pequeña manifestación frente a la embajada libia cuando alguien disparó contra el grupo desde el primer piso de la sede diplomática. Fletcher recibió un balazo en el estómago y murió en el hospital. La policía británica sometió entonces a la embajada a un sitio que duró once días y Gadafi respondió a su vez enviando a sus fuerzas a rodear la embajada británica en Trípoli. Los asedios terminaron cuando se permitió al personal de ambas embajadas abandonar sendos edificios. El gobierno británico rompió las relaciones diplomáticas con Libia y el personal libio de la embajada en Londres esgrimió la inmunidad diplomática para evitar que la policía les tomara declaración. Londres reanudó las relaciones diplomáticas con el régimen del coronel Muamar el Gadafi en 1999 después de que se llegase a un acuerdo sobre el proceso por el atentado terrorista de Lockerbie (Escocia) y de que el Gobierno libio se declarase en términos generales responsable de la muerte de Fletcher. La Federación de la Policía de Inglaterra y Gales se congratuló de la detención del sospechoso por los rebeldes libios y expresó su esperanza de que pueda finalmente hacerse justicia.