Las autoridades de Rusia han informado que el nuevo atentado en Volgogrado (la antigua Stalingrado), y que ha causado al menos 10 muertos, ha sido perpetrado por un terrorista suicida. En un primer momento, los investigadores habían descartado esta opción porque encontraron un artefacto explosivo en el interior del trolebús, que ha quedado hecho añicos. Asimismo, han rebajado a 10 la cifra de víctimas mortales después de haberla situado en al menos 15. Sin embargo, el número de muertos podría ascender en las próximas horas, ya que de los 22 heridos hospitalizados tras el ataque, seis se encuentran en estado extremadamente grave, según el Ministerio de Sanidad ruso. Se trata del segundo ataque que sufre la ciudad después del de este domingo. Ambos atentados se producen cuando faltan 40 días para el inicio de los Juegos Olímpicos de Invierno, que se celebran en el complejo de Sochi.

"Ahora ya se puede asegurar, de forma preliminar, que el artefacto explosivo fue activado por un terrorista suicida, un hombre. Fragmentos de su cuerpo han sido enviados (a un laboratorio) para pruebas de ADN que pudieran permitir su identificación", ha explicado el portavoz del Comité de Instrucción (CI) de Rusia, Vladímir Markin, a la agencia Interfax.

Atentados relacionados

Al mismo tiempo, Markin ha confirmado que el atentado suicida de este lunes tiene relación con el perpetrado este domingo en la misma ciudad, que ha causado 17 muertos en una estación de tren. En este caso, fue una viuda negra la que activó la bomba. "El hecho de que la metralla de ambos artefactos explosivos sea idéntica confirma la versión de que ambos atentados están relacionados entre sí. Puede que las bombas hayan sido fabricadas en el mismo lugar", ha señalado.

La bomba que ha estallado este lunes por la mañana en un trolebús del transporte público de Volgogrado tenía una potencia equivalente a cuatro kilogramos de trilita, según el portavoz del CI. "Del trolebús quedó solo la carcasa (...) La explosión fue de tal fuerza que reventó las ventanas de un edificio de viviendas de cinco plantas que está enfrente", ha detallado Markin.

Imágenes de la televisión oficial mostaban los restos retorcidos del autobús, cuyo techo saltó por los aires y quedó esparcido por la calle. El vehiculo ha quedado totalmente destrozado. "Esto es horroroso", ha dicho el vicegobernador de la región, Valisi Galushkin, que ha señalado que el balance de víctimas es provisional y ha explicado que los heridos han sido evacuados rápidamente a hospitales cercanos.

SEGURIDAD REFORZADA EN TODO EL PAÍS

El presidente ruso, Vladímir Putin, ha ordenado al Comité Nacional Antiterrorista, que coordina la labor de todas las fuerzas de seguridad del país, que refuerce las medidas de seguridad en el territorio de toda Rusia para prevenir nuevos ataques. El Ayuntamiento de Moscú, por su parte, ha ordenado redoblar las medidas de seguridad en la capital rusa.

"En vista de lo ocurrido en Volgogrado, se han tomado medidas adicionales de seguridad en el transporte y también en los servicios de prevención de situaciones de emergencia", ha informado el jefe del Departamento de Seguridad del ayuntamiento moscovita, Serguéi Mayórov.

Los dos atentados muestran la vulnerabilidad de Rusia, que el próximo 7 de febrero inaugurará en la ciudad de Sochi, a 690 kilómetros de Volgogrado, los Juegos de Invierno. Unos juegos que son uno de los proyectos estrella del presidente ruso, Vladimir Putin. No ha habido reivindicaciones de ninguno de los dos atentados.