El secuestrador de un avión de pasajeros de la compañía turca Pegasus Airlines, en vuelo de la ciudad de Diyarbakir a Estambul, se entregó a las autoridades en Ankara, adonde fue desviado el aparato. Según el ministerio turco del Interior, el pirata aéreo, identificado como Mehmet Goz, aseguró tener explosivos consigo para hacer estallar la nave con sus 175 pasajeros a bordo.

Al principio hubo confusión sobre la identidad del secuestrador, del que se dijo que podía ser una mujer. El avión había despegado a las 15.40 GMT del aeropuerto de Diyarbakir, en el sureste del país y habitada por una mayoría kurda. El Ejército turco había lanzado en los últimos días una ofensiva militar contra los rebeldes kurdos del ilegal Partido de los trabajadores de Kurdistán (PKK) en el sureste del país, lo que causó la muerte de una decena de personas.